Adolfo-Vargas-Espínola

El próximo miércoles 19 de octubre se conmemora (definitivamente no se celebra) el Día Internacional sobre la Concientización y Temprana Detección del Cáncer de Mama. Ese es uno de los padecimientos que más afectan a las familias en México.

El cáncer (en general) es la enfermedad crónico-degenerativa de mayor incidencia entre los adultos, y es un padecimiento que no hace distinción de raza, nivel socioeconómico o sexo. En particular, el cáncer de mama aparece como la segunda causa de mortalidad entre las mujeres mayores de 20 años. Lo cual lo convierte en un grave problema de salud.

El cáncer, como el crimen, lamentablemente no se pueden “evitar”. Pero sí se pueden realizar algunas acciones para minimizar que su impacto sea mortal y económicamente catastrófico para una persona o su familia.

Te platico tres datos estadísticos publicados a inicios de este año por el INEGI (estadística de 2013) sobre este padecimiento:

• Cada año se registran más de 20 mil nuevos casos de esta enfermedad, que representa un 25% de los diagnósticos entre mujeres y el 14% de las muertes relacionadas con el cáncer.

• Entre las mujeres de 30 a 74 años se encuentra el índice de morbilidad (personas que enferman en un lugar y un período de tiempo determinados) más alto. Siendo aún más notorio después de los 50.

•  90% de las pacientes diagnosticadas ya se encuentran en las fases tardías (fase III y IV) del cáncer, con tasas de supervivencia ubicadas apenas entre el 7 y 36%.

La posibilidad de sobrevivir a un cáncer de mama depende de tres factores:

• Prevención: Los hábitos y costumbres están al alcance de nuestras manos el poderlos modificar, por lo que una alimentación saludable, realizar actividad física, controlar el consumo de alcohol, y cuidar tanto el sobrepeso como la obesidad, pueden ayudar a minimizar la incidencia de cáncer de mama a lo largo del tiempo.

• La detección temprana: La auto exploración, el ir a consulta médica periódicamente y en su caso el uso de tecnología a través de una mamografía, son acciones fundamentales para poder detectar síntomas y así actuar en tiempo.

• Las posibilidades económicas: Los costos de la atención de un cáncer de mama dependen directamente del momento en que sea detectado, ya que de ello dependerá si se requiere cirugía, radioterapia, quimioterapia o la combinación de alguno de estos tratamientos. En México existen dos opciones.

• La atención en el sector público, ya sea en el Seguro Popular, IMSS o Issste (y con sus respectivas limitantes). Donde al gobierno cada paciente le cuesta entre 74,522 y 199,522 pesos (datos de 2013).

• La atención en el sector privado, donde la atención del paciente puede ser mucho más cómoda y pronta, aunque los costos de esta estarán entre los 200,000 y 1,500,000 de pesos. Estos costos pueden ser cubiertos por el paciente y su familia, o por un seguro de gastos médicos mayores (si este se contrató anticipadamente).

La intención de este artículo es informarte, para que tomes las medidas que están a tu alcance y así poder evitar las consecuencias de una enfermedad que, si bien no sabemos si se va a presentar, puedas al menos prevenir sus daños, Y en su caso, aumentar tus posibilidades de supervivencia si es que la llegaras a enfrentar.

Si está en tus manos, no esperes a perder la salud y lamentar en ese momento el no haber actuado antes. Tomar decisiones al final siempre te llevará a menores y más caras opciones.

Si tienes dudas o comentarios, por favor házmelos llegar a mi correo, que con gusto las responderé. Y claro, si te sirvió esta información, por favor compártela.

¡Ah!… y recuerda, la lana viene y va, pero porque tú la dejas escapar.

¡Hasta la siguiente colaboración!