Decenas denuncian fraude en pagos de luz

ANA CECILIA GUTIÉRREZ
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Aunque alrededor de 60 ciudadanos nunca contrataron la nueva modalidad de pago del suministro eléctrico, ante la compañía concesionaria deberían de pagar con las tarjetas inteligentes de la empresa Iusa, principal fabricante de los medidores de luz.

Se trata de un  fraude hecho por los empleados de Iusa, quienes para llegar a sus meta de micas vendidas, al visitar casas donde los propietarios no se encontraban, aventaban la tarjeta y dejaban un aviso, pero sólo en algunos predios, pues a otros no les avisaban.

Los ciudadanos al ver que no les llegaba su recibo de luz, acudieron a la CFE y ahí se enteraron que ya habían cambiado de medidor. Ahora tendrán que pagar con la tarjeta inteligente, además de un finiquito.

Es el caso de Ana María Herrera Quijano, vecina del barrio de San Román, quien bimestralmente pagaba 128 pesos. En días pasados acudió para reclamar y ahí se enteraron que empleados de Iusa, sin su autorización, les cambiaron el medidor y ahora tiene que pagar un finiquito de 882 pesos. Solo al hacerlo podrá activar su mica.

Otra de las afectadas fue María Magdalena Balán Rosado, quien acudió a realizar su reclamo debido a que le cambiaron el medidor y ella no firmó ningún documento autorizándolo. Exige que le cancelen la tarjeta inteligente.

Como estos casos hay muchos, pues a diario acuden a la CFE a realizar reclamos y pedir la cancelación de la tarjeta, la cual no es obligatoria.

Pero los empleados de Iusa, incluso, en el mes de abril se hacían pasar por empleados de la CFE y le decían a las personas que eran obligatorias.

Afirmaban que el pago del servicio de luz tenía que hacerse a través de la tarjeta, de lo contrario se quedarían sin energía eléctrica, bajo esee argumento los usuarios aceptaban sin reclamos las tarjetas.

Sin embargo, no contaron con que al falsificar  firmas en el barrio de Santa Ana, en una cada deshabitada hicieron la misma operación, pero no sabían que los los propietarios estaban muertos. Fue su hijo quien se percató de que las tarjetas llegaron a nombre de sus padre, y acudió a la Profeco a levantar su queja.

Manuela Rodríguez Castillo, jefa del departamento de Servicio, de la Profeco, declaró que a diario reciben aproximadamente ocho denuncias por el excesivo cobro en los recibos de luz y otras por la tarjeta.

La Profeco hizo un llamado a la ciudadanía para  que no se dejen engañar, pues la tarjeta que Iusa entrega, en muchas ocasiones se hace sin la autorizacion de los usuarios del servicio de energía electrica, quienes tienen  que cancelarla para regresar al antiguo pago del recibo.