Denuncian otro caso de bullying en escuela

Estado, Martes 16 diciembre, 2014 a las 12:39 pm
Agresión. El dedo del menor corre el riesgo de ser amputado.

Agresión. El dedo del menor corre el riesgo de ser amputado.

ANA CECILIA GUTIÉRREZ
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Un menor de 10 años fue agredido por uno de sus compañeros de clase en la escuela primaria Justo Sierra Méndez, quien le lesionó un dedo, pero tras un mes de lo sucedido, hasta hoy el dedo que le fracturó no queda bien, además el director no permitió que la madre del pequeño hable con la del agresor.

M. B. C., madre del pequeño de 10 años de edad, alumno del quinto grado, comentó a EL EXPRESO que su hijo podría perder el dedo meñique derecho luego de ser agredido por un compañero de clases.

La madre del menor declaró que no es la primera vez que se dan casos de bullying en la escuela, pero las demás madres y padres no hablan.

En entrevista, la mujer refirió que el pasado 11 de noviembre como de costumbre fue a la escuela por su hijo, pero todo parecía de lo más normal… hasta que por la noche, su hijo le contó de la severa lesión que le causó un compañero.

El niño tenía la mano hinchada y de inmediato la fémina lo trasladó al Hospital General Dr. Javier Buenfil Osorio, donde el menor fue ingresado, pues presentaba fractura del dedo meñique, además de estar zafado el medio y el angular.

El menor permaneció ingresado tres días y tuvo que ser ingresado al quirófano para que le realizaran el reacomodamiento de los dedos y le colocaran un yeso.

M. B. C. comentó que luego de un mes con el yeso acudió de nuevo con el médico, quien le dijo que aún no debía quitarle el yeso. La mujer le explicó que días después el dedo olía muy mal, pero el doctor insistió en que era por el yeso.

A ver que el olor del dedo del menor era fétido, lo trasladó a la Clínica Campeche, donde le dijeron que ya no era necesario que usara el yeso y le recomendaron cremas y medicamentos para que le saliera de nuevo piel.

“No quedó bien, su dedito está chueco y ahora se pone negro. Lo voy a llevar a Mérida, pues aquí no me resuelven nada y temo que vaya a perder el dedo”, dijo angustiada la madre.

De igual forma acusó al director del turno vespertino, José Francisco Angulo López, de no hacer nada, pues pese a que le expuso el caso de su pequeño y le pidió que le dijera quien era la madre del menor para hablar con ella, pues los gastos médicos ya fueron muchos y ella es soltera, él se rehusó.

Además lamentó que perdió su trabajo por cuidar a su hijo mientras estuvo ingresado.

Por último,M. B. C. dijo a este rotativo que quiere que la ciudadanía se entere de lo que sucede en esta escuela y aseveró que el único que la ha apoyado es el profesor de su hijo.