Ayatola iraní en vallas muestra influencia en Irak

Internacional, Martes 25 septiembre, 2012 a las 1:45 pm

En esta foto del 16 de septiembre 2012, una valla muestra al líder supremo iraní, el ayatola Alí Jamenei, a la derecha, y al ayatola Mohamed Sadiq al-Sadr, el difunto padre del clérigo radical anti-estadounidense Muqtada al Sadr, en Bagdad, Irak. Después de años de creciente influencia, una nueva señal de la presencia de Irán en Irak ha llegado a las calles: miles de letreros que muestran al líder supremo de Irán sonriendo a una población que en otro tiempo se movilizó contra la República Islámica en una guerra que duró ocho años. (AP foto/Karim Kadim)

Associated Press

BAGDAD (AP) — Después de años de creciente influencia, un nuevo indicio de la presencia de Irán en Irak ha llegado a las calles: miles de carteles y vallas que muestran al líder supremo de Irán sonriendo a una población que en otro tiempo se movilizó contra la república islámica en una guerra de ocho años.

La campaña pone de relieve las dudas generalizadas sobre cuán independiente puede permanecer Irak y su población mayoritariamente chií con respecto a su vecino del este, el peso pesado chií de la región, ahora que las tropas estadounidenses han abandonado el país.

Los carteles del gran ayatola Alí Jamenei aparecieron por primera vez en agosto en al menos seis barrios chiíes de Bagdad y en todo el sur de Irak, dominado por los chiíes, como parte de una práctica anual pro-palestina iniciada hace años por Irán. Han aumentado notablemente desde entonces.

“Cuando veo estas fotos, siento que estoy en Teherán, no en Bagdad”, dijo Asim Salman, de 44 años, propietario chií de un café de Bagdad. “Las autoridades deben retirar los carteles, que nos hacen enojar”.

En Basora, unos 550 kilómetros (340 millas) al sur de la capital, las imágenes están cerca de cajas de donaciones decoradas con mensajes en los idiomas de ambos países, árabe y farsi.

Un funcionario del gobierno local de Bagdad dijo que los trabajadores municipales temen represalias por parte de las milicias chiíes leales a Irán en caso de retirarlos. Habló bajo condición de guardar el anonimato debido a preocupaciones por su seguridad.

Una de esas milicias, Asaib Ahl al-Haq, incluso se jactó de haber puesto en marcha la campaña de los carteles, que forma parte de una tendencia que socava un esfuerzo de casi una década, liderado por Washington, para implantar aquí una democracia al estilo occidental.

El jeque Alí al-Zaidi, un líder de alto rango en la milicia, dijo que distribuyeron unos 20.000 carteles de Jamenei en todo Irak. Agregó que Jamenei “goza de apoyo popular en todo el mundo”, incluyendo Irak, donde “es aclamado como un líder político y religioso”.

Las tensiones entre Irak e Irán por la guerra que los enfrentó entre 1980 y 1988, con casi medio millón de muertos como consecuencia, nunca se han disipado del todo. Pero la sombra de Irán sobre los chiíes iraquíes aumentó tras la caída de Sadam Hussein en 2003 y, en muchos sentidos, ese fenómeno se ha acelerado desde la salida del ejército estadounidense.