El ataque tiene lugar en momentos en que los talibanes y otros milicianos han intensificado sus ataques con explosivos e incursiones a puestos policiales en todo el país, poniendo a prueba la capacidad de los soldados afganos y de la Policía que han tomado control sin las fuerzas militares internacionales que están en retirada.

El general Zelmia Oryakhail, jefe de Policía de la provincia de Paktia, dijo que el atacante iba en motocicleta y detonó sus explosivos en el distrito de Samkani mientras pasaban las fuerzas estadounidenses. Dijo que una escuela acababa de dejar salir a sus alumnos, de 10 a 16 años.

La delegación militar estadounidense acababa de asistir a una reunión de seguridad en la oficina administrativa distrital, dijo el jefe distrital Salé Mohammad Ahsas, quien también asistió a la reunión.

Agregó que parecía que el atacante había estado esperando a la delegación y detonó sus explosivos mientras salía del complejo.

Nueve niños escolares y un Policía afgano murieron en la explosión informó el ministro del Interior.

En otro ataque ocurrido el lunes en la provincia de Laghman, en la región oriental del país, siete civiles afganos murieron, entre ellos dos niños. Una declaración del gobierno provincial dijo que un grupo de cuatro mujeres y dos niños habían ido a las colinas a recoger leña.

Los soldados del ejército afgano y de la Policía enfrentan este año a los insurgentes con poca o sin ayuda de las fuerzas internacionales que han estado en Afganistán desde la invasión dirigida por Estados Unidos con el objeto de derrocar al régimen de al-Qaida después de los ataques del 11 de septiembre en territorio estadounidense.