Tren descarrilado en España iba demasiado rápido

Europa, Viernes 26 julio, 2013 a las 1:34 pm

Excesiva velocidad. De haberse tomado las medidas necesarias el desastre no hubiera ocurrido

Associated Press

SANTIAGO DE COMPOSTELA, España (AP) — Un tren español que se descarriló y se estrelló contra un muro de seguridad al tomar una curva iba tan rápido que los vagones se salieron de los rieles como fichas de dominó, lo que provocó la muerte de 80 personas y heridas a decenas más, según el relato de testigos y videos obtenidos el jueves.

Un análisis de The Associated Press de imágenes de vídeo sugiere que el tren quizá iba al doble de la velocidad permitida, o más, al tomar la curva. Un día después de que España sufrió su accidente ferroviario más mortífero en décadas, una pregunta sin respuesta superó a todas los demás: ¿Por qué el tren iba tan rápido?

Los investigadores abrieron el jueves una pesquisa sobre los posibles fallos del conductor de 52 años y los sistemas de regulación de velocidad incorporados en el tren.

Los expertos dijeron que una de las dos posibilidades, o ambas, debe ser responsable del desastroso choque del miércoles por la noche del tren que transportaba 218 pasajeros y cinco tripulantes a Santiago de Compostela, destino de peregrinación católica que se preparaba para celebrar a su santo más venerado.

En lugar de eso, esta aturdida ciudad de casi 100.000 habitantes convirtió su escenario deportivo en un refugio para los muertos y el duelo.

“Todos los españoles sienten el dolor de las familias y esperamos que los heridos se recuperen poco a poco”, dijo el rey Juan Carlos de España, quien visitó, acompañado por la reina Sofía, a los sobrevivientes hospitalizados por el accidente ocurrido 4 kilómetros (2,5 millas) al sur de Santiago de Compostela. La pareja real vistió de luto.

El Ministerio del Interior dijo que el número de muertos había aumentado a 80. El incidente es el peor accidente ferroviario en España en cuatro décadas. El gobierno gallego dijo que 94 personas permanecían hospitalizadas en seis hospitales regionales, 31 de ellos en estado crítico, entre ellos cuatro niños.

Por la mañana, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, originario de Santiago de Compostela, recorrió el lugar del accidente junto a los trabajadores de rescate y visitó a los heridos y sus familias.

“Para un nativo de Santiago como yo, este es el día más triste”, dijo Rajoy, quien declaró que España guardará tres días de luto. Agregó que las autoridades judiciales y del Ministerio de Fomento iniciaron investigaciones paralelas sobre las causas del accidente.

Muchas de las víctimas sufrieron quemaduras graves cuando el combustible diesel del tren provocó un incendio mientras algunos pasajeros estaban atrapados en vagones destrozados y volteados. Funcionarios de emergencia tomaron muestras de ADN de los que tenían las peores quemaduras, o de los inconscientes, en un esfuerzo por identificar tanto a los vivos como a los muertos.

Las declaraciones de testigos respaldadas por imágenes de las cámaras de seguridad al momento del desastre sugieren que el tren de ocho vagones iba demasiado rápido cuando intentó girar a la izquierda debajo de un puente. La compañía ferroviaria Renfe dijo que 218 pasajeros y cinco tripulantes viajaban a bordo del tren. Los funcionarios españoles dijeron que el límite de velocidad en ese tramo de vía es de 80 kilómetros (50 millas) por hora.

Un cálculo de Associated Press de la velocidad del tren en el momento del impacto utilizando la marca de tiempo del vídeo y la distancia estimada entre dos pilones dio un rango de 144 a 192 kilómetros por hora (de 89 a 119 mph). Otra estimación calculada con base en la distancia típica entre travesaños ferroviarios da un rango de 156 a 182 kilómetros por hora (96-112 mph).

Funcionarios de Santiago cancelaron las festividades del jueves y tomaron el control de la cancha de baloncesto bajo techo de la ciudad para usarla como una improvisada morgue. Allí, los familiares de los muertos se veían llorando y abrazándose.

El Ministerio del Interior descartó que se tratara de un acto de terrorismo.

Aunque sectores de la prensa española señalaron con un dedo acusador al conductor del tren, funcionarios gubernamentales y expertos ferroviarios advirtieron que la culpa podría recaer en un fallo de los sistemas diseñados para mantener los trenes a una velocidad segura.

José Antonio Santamera, presidente del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de España, dijo que uno de los mecanismos supuestamente a prueba de errores del tren podría haber fallado.

“El sistema de seguridad detecta un fallo del conductor, (por ejemplo) si ha sufrido un desmayo y no responde a las llamadas, y entonces activa los sistemas de seguridad del tren. Así que casi que descarto un error humano”, dijo Santamera.

Añadió que el accidente ocurrió en un punto en que un sistema de regulación de velocidad da paso a otro, lo que sugiere un posible fallo en el punto de transferencia.

El investigador principal de España en el accidente, el juez José Antonio Vázquez Taín, ordenó a los detectives interrogar al conductor del tren.

Renfe identifica al conductor, Francisco José Garzón Amo, como un empleado con 30 años de experiencia en la empresa ferroviaria estatal que se convirtió en conductor asistente en el año 2000 y en conductor plenamente calificado en 2003. La compañía dijo que Amo tomó el control del tren de un segundo operador a unos 100 kilómetros (65 millas) al sur de Santiago de Compostela.

El presidente de Renfe, Julio Gómez-Pomar Rodríguez, dijo a la cadena de radio Cope de España que el conductor había trabajado en esa ruta durante más de un año.