El tequila mexicano busca conquistar a China

Luego de que los presidentes Xi Jinping y Enrique Peña Nieto destrabaran negociaciones que por años estuvieron detenidas, la industria nacional del tequila ya se prepara para comenzar a vender a China y en su mira está convertirlo en el segundo mercado de exportación, después de Estados Unidos.

El tequila es la bebida que por excelencia remite a México y aunque ya tiene presencia en más de 100 países, en China su acceso ha sido muy limitado por razones legales y sanitarias impuestas por la nación asiática. Pero eso está por cambiar.

El secretario de Agricultura mexicano, Enrique Martínez, dijo que las autoridades sanitarias chinas concluyeron que el tequila de mayor calidad no es nocivo para la salud, lo que abre la puerta para que empiecen contactos entre empresarios de ambos países para actividades de promoción y mecanismos específicos para poder iniciar la venta.

“El potencial que tiene la industria es que en cinco años pueda llegar (la exportación) a 10 millones de litros, convirtiéndose como mercado en lo particular en el segundo destino de exportaciones”, dijo a The Associated Press Ramón González, director del Consejo Regulador del Tequila, la asociación que promueve la bebida.

China, añadió, es un país visto como “un mercado de altísimo poder adquisitivo, donde están hoy los nuevos ricos”. El tequila, dijo, está pensado para ir a “un nicho de alto poder adquisitivo” en un país con más de 1.300 millones de habitantes.

“Estoy convencido que vamos a tener mucho éxito… que ese producto mexicano va a conquistar la preferencia de los consumidores de aquel país”, señaló esta semana el secretario de Agricultura mexicano.

En México hay dos categorías de tequila, que depende del porcentaje de azúcares procedente de la planta de agave del que se destila: el 100% y el 51%.

Para los conocedores, el mejor tequila es el 100% agave, y ese es justamente el que no tenía aún acceso al mercado de China, una nación que tiene en México a su segundo socio comercial en Latinoamérica.

Las normas chinas prohíben la entrada de bebidas con niveles mayores de 200 miligramos de metanol por litro de alcohol. Y el tequila 100% tiene hasta 300 miligramos de metanol.

Bajo esa limitación, México sólo podía vender tequila 51% y sus exportaciones hasta ahora han sido mínimas.

Estadísticas de la industria tequilera señalan que en 2012 se produjeron unos 254 millones de litros, de los cuales 165,7 millones se exportaron.

A China, sin embargo, sólo se vendieron el año pasado 410.250 litros, que representaron apenas un 0,25% del total de la exportación mientras que el 80% de lo exportado terminó en Estados Unidos.

El Consejo Regulador del Tequila informó que en paralelo a la producción la industria tiene un inventario de 320 millones de litros.

En mayo de 2010, el entonces presidente Felipe Calderón presumió que China había notificado a su gobierno que permitiría el ingreso de tequila a su mercado.

Pero al término de su gobierno, en 2012, no sólo no hubo ningún acuerdo para que la tradicional bebida mexicana entrara al gigante asiático, sino que la relación bilateral sufrió un enfriamiento en todos los ámbitos luego de que el mandatario recibiera al Dalai Lama y enfureciera al gobierno chino.

Peña Nieto y Xi dejaron atrás las tensiones y durante una visita del mandatario chino al país a principios de junio acordaron relanzar la relación bilateral y ampliar los lazos comerciales para equilibrar su balanza, que ahora es negativa para México en una proporción de 10 a 1. Entre lo acordado está la apertura del mercado chino al tequila.

Pese a que los pronósticos de crecimiento de China para 2013 se han reducido –de 8% a 7.75%, según la estimación del FMI–, su economía se mantiene robusta y con una creciente clase media dispuesta a consumir.

“Se espera que la introducción del tequila mexicano en el sector de los alimentos tenga una chispa inicial en su demanda debido a su relativa novedad”, dijo Christopher Shanahan, gerente del programa de Alimentos y Agricultura de Frost & Sullivan, una firma estadounidense de investigación de mercado.

La bebida alcohólica más popular en China es la cerveza y aunque en la categoría de destilados está a la cabeza su bebida tradicional denominada baijiu (elaborado con arroz, sorgo o trigo), en los últimos años han comenzado a ser aceptados otras bebidas como el whisky, el coñac y el vodka.

En una respuesta escrita, el gerente Shanahan dijo que la actual estrategia del gobierno de Xi es promover el gasto de la gente como un medio para compensar la desaceleración de su economía, lo cual puede traducirse en un mayor consumo en restaurantes, considerado el primer canal de ventas de la mayoría de las bebidas alcohólicas, particularmente el tequila.

En el largo plazo, sin embargo, consideró que los productores mexicanos de tequila podrían enfrentarse a una política de China de proteger a sus empresas de la competencia exterior.

Pero el reto de conquistar al gigante asiático no amedrenta a los productores mexicanos.

“Creemos que tenemos buenas armas (para) abrir ese mercado y cómo soportarnos y sustentarnos en ese mercado”, dijo Francisco Alcaraz, director internacional y maestro destilador de Tequila Patrón, una empresa dedicada casi en su totalidad a exportar tequila 100% agave y que ya tiene presencia en Singapur y Japón.

En 2012, Patrón produjo unos 18 millones de litros de tequila, de los que exportó un 99,5%. Su principal mercado es Estados Unidos, hacia donde se dirige alrededor del 80%

Para la entrada potencial a China, el equipo de mercadotecnia de Tequila Patrón ha comenzado a explorar el mercado local en cuanto a sus costumbres y forma de ser para preparar sus estrategias de publicidad.

“Se contrata gente de allá para que vean usos, costumbre, cultura, gastronomía, maridajes que se hacen en comidas para atacar esos gustos y para poder cautivarlos”, dijo David Rodríguez, director de producción de Tequila Patrón, una empresa asentada en el estado occidental de Jalisco, donde principalmente se produce la bebida mexicana.

Comentó que en Japón, por ejemplo, hay personas que llegan a tomar el tequila solo en las rocas o mezclado con frutos, como bayas.

En México, el tequila suele tomarse solo y sin hielo, aunque algunas personas también lo combinan con refresco de toronja o limón.

Para Rodríguez, dos años después de que se abra el mercado se podrá tener más certeza sobre la aceptación o no del tequila en China.

“Los mercados asiáticos tratan de occidentalizarse en cuestiones de marcas de prestigio, (de) las marcas que son aspiracionales”, consideró.

Shanahan, de Frost & Sullivan, consideró que el éxito de los productores mexicanos dependerá de si son capaces de encontrar los socios chinos adecuados para distribuir la bebida y proteger la marca original.