Mazatlán, Sinaloa.- La de vida de Brian de Jesús se “apagó” a tan corta edad. Fue arrebatada ferozmente por la violencia, que por igual mata a adultos, mujeres, jóvenes y niños. Mañana regresaría a la secundaria para cursar el segundo grado de este nivel de educación básica.
La madrugada del pasado viernes, Brian de Jesús convivía en un domicilio de la Colonia Niños Héroes de Mazatlán, cuando fue alcanzado por la balas de un fusil de asalto Automatic Kalashnikov, mejor conocido como “cuerno de chivo”.
En medio de un charco de sangre y con las piernas prácticamente destrozadas, fue rescatado para llevarlo al Hospital General, y aunque durante horas estuvo bajo vigilancia médica, el daño de tejidos vitales logró avanzar hasta provocarle la muerte.
En la colonia donde vivía, todos lo recuerdan como un niño ejemplar, a sus 12 años de edad.
Su abuela Patricia Espino, lo recordará como un menor alegre, dedicado y de gran corazón. “Tenía muchos amigos, le echaba ganas a la escuela, aquí afuera (en la cochera) siempre estaba lleno, era un niño feliz”, expresó.
Primos, vecinos y tíos no asimilan el hecho.
“Brian de Jesús, era bromista, soñador, juguetón y era algo bonito para todos”, así lo describió una de sus tías, mientras que para sus amigos, era divertido y era alguien con el que siempre se podía jugar.
De acuerdo con la familia, Brian de Jesús se encontraba en la casa de la pareja de su padre cuando un grupo de sujetos con armas de grueso calibre llegaron al sitio y abrieron fuego para asesinarlo.
El cuerpo del menor comenzó a ser velado la noche de ayer, y se espera que sea sepultado este día.
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