Raúl Sales Heredia Heredia
Palabras Altisonantes
Raúl Sales Heredia

Tapando el sol

Voces, Viernes 25 mayo, 2012 a las 9:10 am

 Con el movimiento estudiantil actual se presentan va­rias lecturas, algunas muy fumadas y otras, las preocu­pantes, restándole importancia a que un grupo de uni­versitarios se unan para demostrar un rechazo.

 Los alumnos de la UNAM echando porras del IPN y estos en retribución aventándose unos “Goyas” al ITESM, la Ibero, La Anáhuac y el ITAM, entre otras, nuestras universidades más prestigiadas aportando alumnos para unirse en un movimiento que no se ha­bía dado desde el fatídico 68.

Los comentarios en contra hablan de que sólo fue­ron 45,000 y que en un universo de 9 millones eso no es nada. A ver, ¿cómo fue? 45,000 seres humanos, fu­turos abogados, arquitectos, médicos, ingenieros y un largo etc… ¿no son nada?

 En estos espacios escribo de la posibilidad de cambiar nuestro entorno y para eso solo necesitamos nuestra ac­ción. Ahora imaginen que a su intención de cambiar su entorno se suman 44,999 personas más que buscan lo mismo que tú y que olvidan por unos instantes que eres de otro colegio, de otra facultad, de otra ideología, de otra preferencia sexual, en fin olvidan todo lo que puede dividir y se concentran en aquello que los hermana y une. Son Universitarios, son mexicanos y están Hartos de no ser tomados en cuenta.

 Seguramente han escuchado decir a nuestros po­líticos que los jóvenes son el futuro del país. Segura­mente no esperaban que el futuro se les convirtiera en presente de la noche a la mañana y les cambiara todo el panorama.

 Seamos claros, algunos políticos enarbolarán la bandera de los estudiantes y estos se dejarán consentir. Ninguno dirá que está en contra, pues no es funcional pero intentarán por todos los medios de restar impor­tancia al movimiento.

 Algunos seguidores de candidatos -incluso los lla­marán “porros”, vándalos”- y se volcarán a decir que no importan en lo mas mínimo. Que son pagados o que son violentos.

 Las campañas se han encargado de polarizar mi sociedad, o estás con o estás contra. Pero de repente aparece un nuevo grupo, un nuevo jugador conforma­do por 45,000 cabezas visibles y miles más apoyando pero aún temerosas de salir.

 Estos 45,000 estudiantes ya son parte de la his­toria y podrán contarle a sus nietos que fueron par­te del movimiento estudiantil del 2012 que logró ________________ (de ellos depende y a nosotros nos urge).

 En una sociedad lastimada, temerosa, políticamen­te dividida y tristemente apática. Un grupo de jóvenes me devuelve la esperanza, me gritan que ahí están y que llegaron para quedarse y como sociedad debemos de velar porque su “protesta” sea escuchada, y su intención sea sana. Pues a esos 45,000 seres están siendo atraídas nuestras esperanzas de mejora y de cambio. Y los uni­versitarios lograron en unos días lo que no habían lo­grado los partidos políticos en años: despertarnos como sociedad y emocionarnos como mexicanos.

 Gracias Universitarios por demostrar que hay cosas más importantes que donde estudio o por quién voto. Gracias por despertarnos y sacudirnos. Gracias por gritar más fuerte que las televisoras y encauzar una sociedad. Gracias por devolverme la esperanza y si, ¡soy su fan!

 Y a los que creen que se puede tapar el sol con un dedo… al sol le vale un pepino que lo tapen ahí sigue brillando para todos los demás.