Un error sería no reconocer los problemas

Un problema bien identificado es un problema medio resuelto. Cuando ocurre una falla es necesario, primero, reconocer que se tiene una dificultad y, segundo, revisar el sistema para saber qué es lo que lo está provocando.

Los cambios en el gabinete municipal del alcalde carmelita Enrique Iván González López no deben de extrañar a nadie. A poco más de un año del inicio de su gobierno, las críticas de la oposición, los resultados nimios en algunas áreas, pero sobre todo los reclamos de la ciudadanía llevaron a lo inevitable: reconocer que se tiene un problema, identificarlo y darle una solución.

Cuando se está al frente de una administración pública en uno de los municipios más importantes del país, con problemas sociales que la misma naturaleza de tu vocación te originan -en este caso la petrolera- y viviendo al filo de los recortes presupuestales y de un heredado desorden financiero, es necesario tener a los mejores hombres en las áreas claves. Aquellos que –el propio gobernador Fernando Ortega Bernés ha insistido en ello- puedan hacer más con menos, que sean creativos e imaginativos y que medren ante las dificultades.

El error no es aceptar que alguno de tus colaboradores no daba ‘el ancho’, ni mucho menos hacer los enroques que consideres urgente para mejorar la atención a la ciudadanía; el error hubiese sido caer en el orgullo de muchos en el poder y mantener una situación insostenible, por encima de los daños que se provoque entre la población a la que se gobierna.

Una revisión a fondo de los aparatos gubernamentales, de los hombres que son claves en un gobierno de cualquiera de los tres niveles, de aquellas personas que tienen en sus manos el servicio ciudadano, la solución de problemas de aquellos que les pagan con sus impuestos, debería de ser una regla en todas las administraciones, sobre todo en las municipales, que son las de mayor cercanía con la población y cuyas finanzas son las más lastimadas.

TUMBABURROS

Comercio. (Sust. común) Negociación que se hace comprando o vendiendo diversos géneros o mercancías. Actividad que en los últimos años ha ido en picada en el estado de Campeche debido a la contracción económica y que vio su peor momento en agosto pasado, cuando los campechanos dejaron de ir a las tiendas, según el Inegi.

Mazo. (Sust. común) Martillo grande de madera. Herramienta utilizada por una banda de ladrones para extraer joyería de lujo de los aparadores de conocida cadena comercial y por cuyo uso ha adoptado el nombre de ese objeto para su palomilla.

Venganza. (Sust. común) Satisfacción que se toma de algún agravio recibido. Eso es lo que planea conocido equipo de beisbol de las grandes ligas luego de que fueran barridos hace unos años en una final que en unos días tendrá se segunda edición.