Desconfiados (8)

Leía como si devorara las páginas. Manuel no despegaba los ojos que, a ratos, se le engrandecían como platos.

-Yo no entiendo, periodista. ¿Esas bardas pintadas del diputado federal que va a dar un informe qué significan?, ¿a quién va a informar un pluri que nadie eligió?

-Estoy de acuerdo contigo, Manuel. Pero de mi boca y de mi pluma ni oirás su nombre. Hace años que fijé posición y eso no ha cambiado.

-Pues eso dices tú, pero otros diputados y hasta senadores que sí fueron electos parecen que no reaccionan más que para la imitación.

-El tema hoy, como quedamos, es Enrique Iván, el alcalde de Carmen.

-Le sacas al bulto, periodista.

-No le saco, pero Manuel, hay demasiada inmadurez en la actuación de nuestros políticos. Los priistas deberían estar empujando para que le vaya bien en su cierre al gobernador, y no, por sus ansias de poder y de riqueza se están prestando a cada cosa. De veras, los priistas no se dan cuenta que si no apoyan a su gobernador en la salida, al que sea candidato se le complica la elección.

-Mira que las elecciones no serán como eran. El presidente tiene sus amigos, sus intereses y Campeche así como que representa mucho, mira que sólo dos diputados federales y los senadores. La cantidad de población y el número de votos no son para quitarle el sueño a nadie.

-Sí, pero un gobernador de oposición en la entidad que produce hasta ahora el mayor petróleo, pues como que…

-Nada, amigo. No pasa nada, ya verás.

-Bueno, pero Enrique Iván también quiere ser gobernador…

-Te decía el martes, ¿quién no?

-La diferencia es que hay quienes tienen presupuesto y quienes no. Yo creo que el alcalde carmelita la ha sorteado, pero en Carmen las cosas no son lo que parecen. Linchan a Chely por la deuda que heredó y que pagó y reestructuró, ahora el ayuntamiento de nuevo pide endeudarse por 300 millones más. La verdad es que Carmen necesita claridad sobre su deuda, pero sobre todo saber si pueden pagar antes de irse.

-Ay, amigo, a ratos no sé qué pensar de ti. A veces dices que estás a favor de las deudas y a ratos que se cuiden.

-Es fácil, Manuel. Si las finanzas dan para pagar, adelante. Lo que no vale es que, como lo hizo Tony y replicó Jorge Carlos, se financien a escondidas, que le deban a  empresarios, que oculten deuda y que la pasen a sus sucesores. Tony le dejó un paquete a Jorge Carlos y éste le hizo lo mismo a Ortega. Ya ves, quienes defienden a esos dos no dicen que es la única deuda real y malhabida porque no le sirvió a nadie más que ellos.

-¿Y qué querías?, ¿que digan que les dieron millones y millones para sus dos hoteles y sus demás lujos? No son tarugos, reportero. La deuda de otro es mala si es que no les da beneficio…

-El caso es que Enrique Iván no la tiene fácil. Si quiere ser gobernador tiene que dejar Carmen reluciente. La diferencia con Campeche es abismal, pero en los gobiernos panistas también hubo sus triquiñuelas y mucho de lo que se debía se tuvo que pagar porque las demoras o las concesiones se dieron mientras fue ayuntamiento panista, pero como cambió al tricolor la exigencia fue otra. Lo sabemos, todos actúan igual. ¿Crees que si es gobierno panista le van a dar margen los priistas? Nada.

-Lo cierto, periodista, es que hay demasiados desesperados.

-Sí, y esa desesperación demuestra inmadurez. Quienes deben de dar resultados tienen que demostrarlo desde sus cargos actuales, pero no sólo dar resultados, también garantizar votos y no todos los que quieren han ganado esos votos, muchos de ellos tienen que demostrar que los pueden ganar y eso es otra cosa. Recuerda que la oposición al PRI es fuerte, al extremo de que Oznerol ganó muy apretado sin que su opositora haya hecho campaña. Las cosas no son tan simples.

-Oye, ¿y el caso de Enrique Iván, su demanda y su inhabilitación?

-Mira, creo que de 50 delegados, haber procedido contra el que se fue del PAN deja el tufo de venganza, pero eso pareciera ser caso cerrado. Así se ve.

-¿Nos vemos, el martes?

-Sí, y ya cerramos este tema con Lavalle Maury y Rosiñol.