Preguntas

Tengo la costumbre de escuchar la radio mientras manejo, sin cambiar de estación si la música no me gusta y tampoco en los anuncios, así que me los aviento completitos. El otro día venía de trabajar y me aventé la retahíla de anuncios de partidos políticos uno tras otro, el PVEM, PAN, MORENA, PRD, MOCI, PRI, en ese orden, diciéndome que sí cumplen, que sí se puede, que son la esperanza de México, que es por ti y para ti, que es la hora del movimiento y todo lo que se ha hecho… nada más faltó cerrar con un ¡A huevo! (alegan que no es ofensa).

Entonces, hagamos magia y construyamos…

“Lo más importante es cumplir y demostrar que sí se pueden hacer las cosas para elevar la esperanza de México, pues hay que hacerlas por ti y para ti, es hora de movernos para que todas las instituciones que se han creado se fortalezcan y trabajen de manera coordinada para cada uno de los Mexicanos. ¿A poco no?…¡A huevo!”

Antes que cualquier color partidista está México, y eso les debe quedar perfectamente claro a todos los contendientes por un puesto de elección popular y doblemente a los que van como plurinominales. Sin necesidad de escucharlos sé que me dirán que trabajarán por una sociedad más justa y equitativa, que buscarán privilegiar la generación de empleos, que se brindará seguridad, que habrá desarrollo, que se mejorará la educación y el acceso a los servicios de salud y, por supuesto, que se atacará de frente la corrupción. No necesito escucharlos pues sé que esos son nuestros problemas y lo que en mi corta experiencia de ciudadano votante he visto, me da pauta de que escucharé lo que quiero escuchar.

Si ya las escucharon déjenme decirles que esas no son propuestas, son objetivos y buenas intenciones y está bien, me da gusto que lo tengan presente pero hay que buscar que las propuesta contengan las estrategias y las acciones.

Si logramos una sociedad instruida con un buen servicio de salud, donde nos podamos sentir seguros y tengamos un crecimiento sostenible, que contemos con un empleo de sueldo digno, estaremos ante una sociedad que enfrentará la corrupción y será justa y equitativa.

¿Por qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quién? ¿Cuánto? Esas preguntas deben tener su respuesta en las propuestas y deben de tener elementos medibles antes, en el proceso y después, se tiene que saber cómo estamos y el lugar en el que queremos estar para buscar el qué hacer mientras se realiza una planeación hacia atrás buscando los elementos a conseguir y las mediciones de desempeño y efectividad que se harán.

Lo primordial, desde mi punto de vista, es transparentar todo lo que implique recurso público y debe de hacerse de manera inmediata y desde ahora, desde las campañas. Hacerlo desde las instituciones pero abriendo una página web donde se ponga la metodología, quién lo realizará, y en dónde aparezcan todos los ingresos, su aplicación, quién ganó la licitación (porque la ganó), sustentar todo con facturas y notas (evitar el manejo de efectivo para no prestarse a malas interpretaciones), poner si hay apoyo de empresarios en especie, cuál fue y cuánto le costó, si hay en dinero… ¡cuidado! Y ya en la administración, seguir haciéndolo pues además de transparencia, tendrán una herramienta de gobierno para mejorar la efectividad y la eficiencia.

Si se transparenta todo y a todos, estaríamos atacando de frente a la posibilidad de que se generaran actos de corrupción y con esto le daríamos al ciudadano el mango del sartén, nos estaríamos dando la oportunidad de vigilarnos y corregirnos y así, la posibilidad de confiar nuevamente en nuestras autoridades pues se estaría haciendo todo bien.

Ni todos los políticos son corruptos ni todos los ciudadanos somos santos pero, eso sí, todos somos mexicanos y todos estamos en equilibrio sobre la misma tabla (que ya no es barco)… y ya no nos queda mucho tiempo.