Las gallinitas ciegas

ENCUESTA. “Golpe de Timón” ha tenido acceso a varias encuestas, algunas publicadas y otras no. La realidad en todas es la misma. El candidato del PRI encabeza las preferencias. Lo que cambia en algunas es la segunda posición: en unas Layda Sansores ocupa el segundo lugar y en otras Jorge Rosiñol. También los puntos de diferencia entre candidatos. Lo que es más motivador: si hoy fueran las elecciones, hay partidos políticos que perderían el registro, y hace falta. La encuesta presentada por  El Universal es la más seria. En base a los porcentajes realizaremos un posible escenario: Con un padrón electoral de 615 mil votantes y considerando que el 7 de junio vote el 68%, eso serían 418 mil votos. La encuesta le da al candidato priista una votación probable del  50.3%, lo que equivale a 210 mil 254 votos. Al candidato del PAN lo ubica con una votación posible de 20.4%, equivalente a 85 mil 272 votos. A Morena le pone el tope del 13.5% de la votación, equivalente a 56 mil 430 votos.

La encuesta advierte que el 8.7 de los votantes anulará su voto, lo que es por mucho el porcentaje más alto de votos nulos que tendrá una elección a gobernador en Campeche. En 2003, los votos nulos solo fueron el 3.1%. En 2009, el porcentaje de votos anulados descendió a 2.71%.

Lo más interesante, entre votos aún indecisos y los que aseguran que anularán su voto suman hoy el 27.8% de los posibles votantes, eso equivale a 116 mil ciudadanos que no han definido su votación.

A menos de 40 días de la elección, nunca el porcentaje del voto indeciso había sido tan alto.

Bajo este escenario, y considerando los resultados de la encuesta, los candidatos tienen que ir por los más de 100 mil votantes que decidirán finalmente la elección. Si solo el candidato del PRI acumula más del 50% de la votación, la “bofetada” para los otros partidos políticos sería estremecedora, estremecedora y merecida.

El error más común de la campaña del 2015 ha sido este: los candidatos hacen campañas como si tuvieran lo que no tienen. Actúan como si tuvieran la preferencia del electorado en lugar de desarrollar una estrategia para aumentar su posicionamiento. Es una elección en la que nueve candidatos a la gubernatura están apostando al juego de la gallinita ciega.

DOBLETE: Para apostarle bien y echarle ganas, y asumiendo que todo quedará en casa, 8 candidatos a alcalde de Campeche también encabezan la lista de regidores por sus partidos: Por el PAN, Alexandro Brown Gantús; del PRD, Víctor Amendola Avilés; MOCI, Manuel Ramos Herrera; la MORENA, Bertha Pérez Herrera; el del PT, Alexis Herrera Ake; la candidata del PANAL, Amalia Pérez Pérez; el PH, David Rea Huicab y el del PES, Rafael Lezama.

Bajo el esquema perdiendo gana, la clase política ya no apuesta ni por sí misma. Fuentes allegadas a “Golpe de Timón” aseguran que, en todos los casos, encabezar las planillas fue la condición para aceptar la candidatura. De los ocho solo tres serán regidores, lo que hará entretenido el próximo Cabildo. Asumiendo que el único candidato que no se registró como regidor es el priista Edgar Hernandez, sus oponentes ya decidieron cómo quedará la elección.

LA PROPUESTA:  El candidato a diputado local, Ernesto Castillo, propuso reducir en el Congreso el número de diputados plurinominales. La propuesta es necesaria e imprescindible. Campeche es el segundo Congreso local con mayor representación del país con base a su población. Castillo propone eliminar cinco plurinominales, lo que sería una reducción de casi 10 millones por cada legislatura. La propuesta es buena pero incompleta, deberían incluir al menos eliminar otras dos de mayoría. El argumento de Castillo es que al disminuirlo la legislatura será más eficiente. No. La eficiencia del Congreso tiene que ver con la capacidad de los diputados, no con la cantidad. Siendo tan cercano a Alejandro Moreno Cárdenas no debemos asumir que fue solo una ocurrencia. Sería oportuno que fuera la primera propuesta que aprobara la siguiente legislatura para la elección del 2018.

SIN RESPUESTAS. Al candidato panista, Jorge Rosiñol, le ha tomado un mes implementar su estrategia de retar al candidato del PRI, Alejandro Moreno, para que se realice una prueba de confianza. La estrategia no ha funcionado, ni funcionará. Lo que es peor, Rosiñol aseguró a la prensa que se realizó el examen, pero no pudo responder al cuestionamiento sobre qué tipo de preguntas se le hicieron, ni cuál fue el resultado de la prueba. La pregunta entonces obligada es ¿Todo esto para qué? Con más preguntas que respuestas Rosiñol insiste en que es el bueno. ¿El bueno para qué?

-REPERTORIO

-Correcta e imparcial la decisión del IEEC de contratar a la periodista de canal Once, Adriana Pérez Cañedo, para conducir el debate a la gubernatura y a la reconocida periodista no le vendrá nada mal esos 70 mil pesos.

-Tendrán 3 minutos los candidatos para intervenir y otros dos minutos para réplicas. Vamos a ver a cuantos les sobra el tiempo.