El director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, declaró que el proyecto del Tren Maya no afectará a los más de 40 sitios arqueológicos que se encuentran identificados, en los que pasará la obra de infraestructura.

En entrevista, aseguró que si una línea del tren pudiera entrar a la zona arqueológica y tuviera afectaciones, simplemente no entrará, por ello se tienen criterios y reglas claras, y también se tiene un consejo de arqueología.

Agregó que el INAH trabajará en tres direcciones referentes al proyecto del Tren Maya; la primera consiste en la prospección, reconocimiento, salvaguarda, rescate y salvamente del patrimonio arqueológico e histórico que se pudiera ver afectado e influenciado por dicho proyecto.

“Se está organizando la prospección, se ha establecido la necesidad de contar con información muy robusta a partir de vuelos Lídar, que se trata de una tecnología avanzada, para poder encontrar los posibles sitios arqueológicos”, expuso.

Explicó que ésta es la parte que involucra el rescate y el salvamento que se hace antes del arranque de una obra.

Dijo que la segunda línea de trabajo será en el mejoramiento, mantenimiento y extensión de la infraestructura de servicios, para la visita a sitios o zonas arqueológicas históricas.

“En general la política sola no abrirá nuevos sitios, pero muy probablemente sí se puedan abrir cuatro sitios arqueológicos; sin embargo, hay más de 40 sitios que se ven influidos por esta obra, que se tienen que mejorar, esto con el objetivo de contar con mejores servicios, tales como áreas de atención al público, una sala de interpretación o un museo en los sitios de preferencia”, puntualizó.

Finalmente, la última línea de trabajo será el etnográfico y de comunidad, ésta es la oportunidad de tener un trabajo de acercamiento con las comunidades; a partir de este trabajo antropológico se pueden recuperar tradiciones, saberes, memorias y el patrimonio biocultural.

Wilmer Delgado Rojas.