El fiscal general de Estado, Renato Sales Heredia, no pudo soportar más las críticas ni avisos de procedimientos legales y degradó a Arturo Bravo Muñoz, hijo de la secretaria de Seguridad, Marcela Muñoz Martínez, como Vicefiscal general, dejándolo como Director de Control Interno de la Fiscalía General del Estado de Campeche.

En rueda de prensa, Sales Heredia salió a aclarar que el retoño de la titular de la SSP nunca fue nombrado Vicefiscal, sino director porque, efectivamente, no cumple con los requisitos contemplados en la Ley Orgánica de la FGE para ser Vicefiscal general.

Sin embargo, el fiscal no ‘aclaró’ que no era Vicefiscal cuando se dio a conocer en redes sociales el 18 de noviembre, ni cuando dos días después, en entrevista, salió a decir que Bravo Muñoz sí cumplía los requisitos y hasta había pasado sus pruebas de control de confianza, pese a ser recomendado, efectivamente, por su madre desde la SSP.

Ayer, Renato dio un paso atrás y dijo que siempre no. Que Arturo Bravo no es Vicefiscal, sino director, aunque por ausencia de Vicefiscal está encargado de ese despacho.

Lo que no dijo Sales Heredia es que su ‘aclaración’ llega sólo después de recibir un docuemento de extrañamiento por parte de la bancada del PRI en el Congreso del Estado, señalándole que el nombramiento de Bravo Muñoz violaba la ley porque no cumplía los requisitos especificados para ese cargo.

Tampoco dijo que la degradación del cargo se da sólo luego de una ola de indignación de los campechanos por el influyentismo y nepotismo de la secretaria de Seguridad Pública que él como fiscal no sólo toleró, sino también justificó.

Según la Ley Orgánica de la FGE, para ser Vicefiscal, entre otros, se requiere que el designado tenga una residencia mínima de cinco años en el estado, y que hayan pasado al menos cinco años desde la expedición de su título profesional. En ambos casos, el vástago de Marcela los incumple.

Ello, sin contar con los señalamientos de nepotismo, de falta de ética, de inmoral y hasta de seriamente peligroso el hecho de que miembros de una misma familia ostenten altos mandos en todas las corporaciones de seguridad de la entidad.

Tras el anuncio de ayer del Fiscal, el padre de Arturo Bravo Muñoz, desde Michoacán, arremetió contra el secretario de Gobierno, Aníbal Ostoa, acusándolo de no haber sabido operar políticamente para defender a su junior, y que era necesario tener en la Segob a alguien con mayores capacidades.

Wilmer Delgado.