Después de cinco meses de haber iniciado el confinamiento social y la suspensión de diversas actividades sociales, culturales y religiosas por la emergencia sanitaria, el día de ayer se reanudaron las misas de forma presencial en las iglesias y parroquias de la Diócesis de Campeche, como en la Catedral de esta ciudad, donde se acataron todos los protocolos sanitarios.

En la misa del mediodía de ayer, que fue presidida por el Obispo José Francisco González González, los fieles católicos hicieron fila para poder ingresar al lugar, todos portando el cubrebocas; en la entrada, personal de la Catedral dispuso de gel sanitizante a los fieles, así como la medición de la temperatura, para luego pisar el tapete donde se desinfectaban los zapatos de los asistentes.

Posteriormente, fueron explicándoles a la feligresía los lugares a ocupar, dos personas por banca como máximo, y una fila de separación entre cada uno, con el fin de mantener la sana distancia.

Durante el culto, el saludo de paz no se efectuó, como parte de los protocolos de la llamada Nueva Normalidad.

Misma situación ocurrió al momento de celebrar la Eucaristía, el Obispo colocaba la ostia en una pequeña bandeja para que el comulgante sólo la agarre y coma.

Previamente, antes de pararse frente al Obispo, una persona de apoyo les iba proporcionando gel antibacterial.

Al término de la misa, de forma ordenada, la gente fue saliendo uno por uno por la puerta que da hacia el Atrio de la Catedral.

Gilberto Ávila.