Bennu es un asteroide cuyo diámetro aproximado es de 500 metros. Cada 1.2 años, completa una órbita alrededor del Sol, es decir cada 436,604 días, y cada 6 años se acerca cada vez más a la Tierra, de hecho, es probable que impacte al planeta en algunos años.
Según los especialistas, el impacto podría suceder a fines del siglo XXII, y dado a su tamaño, composición primitiva y cercanía a la Tierra (órbita potencialmente peligrosa), es uno de los asteroides cercanos más fascinantes y accesibles.
Es por ello que, de acuerdo con lo que explica la web de la misión OSIRIS-REx de la NASA, Bennu es el objetivo ideal para estudiar y de hecho el pasado 7 de marzo se tomaron algunas imágenes a tan solo 4,8 kilómetros de distancia del asteroide.
“Este es un buen ejemplo de algunos de los ángulos de visión oblicuos que estamos trabajando para conseguir (fotografiar) Bennu”, escribió este viernes el equipo que opera OSIRIS-REx en su cuenta de Twitter: “Las sombras en este ángulo dan una sensación de la altura de la roca, y podemos ver más detalles de la superficie desde este ángulo”.
Por otra parte, la NASA informó que el Centro de Estudios NEO del Laboratorio de Propulsión a Chorro (CNEOS), con base en 29 observaciones de radar y 478 observaciones ópticas del asteroide realizadas por rastreadores de todo el mundo entre septiembre de 1999 y enero de 2011, logró predecir los futuros movimientos orbitales de Bennu.
De acuerdo con estos datos, el asteroide pasará cerca de la Tierra, dentro de la órbita de la Luna, en 2135. Esta cercanía alterará ligeramente su órbita y podría impactar el planeta en algún momento entre 2175 y 2199.
No obstante, según el CNEOS, el riesgo acumulado de impacto de Bennu durante este período de 24 años es del 0,037 %, por lo que las probabilidades de que choque contra la Tierra en el próximo siglo es de 1 en 2.700.
Agencias.