Hay que tener muy poca capacidad política, muy poca, para perder lo ganado en tan poco tiempo. La crisis por la que atraviesa el partido Morena parece estar tocando fondo. El deslinde del alcalde de Calkiní, Emiliano Canul, con la dirigencia fue el inicio. Denunciado al interior del partido de vender favores al PRI y de solapar la corrupción del alcalde saliente de aquel municipio, Víctor Hugo Baltazar. La denuncia que hizo Morena al presidente municipal era medio creíble. En términos políticos, sí era posible.

El 12 de noviembre, apenas 40 días después de tomar el cargo, Canul Aké señaló: Morena es un partido vengativo y radical, Zavala está haciendo mucho daño a la militancia y a los simpatizantes.

El dirigente estatal de Morena, Manuel Zavala devolvió el agravio y presentó el 12 de febrero pasado una petición de juicio político contra el alcalde de Calkiní.

En mayo pasado inició un proceso para expulsar del partido a la diputada electa por mayoría, Adriana Avilez, quien fue notificada por la Comisión de Honor y Justicia de Morena que había procedido su expulsión en junio pasado.

Concluido este proceso con Avilez, Morena perdía también a la única diputada electa de mayoría y con ella el partido dejó de ser un grupo parlamentario, para lo que se necesitan al menos tres diputados. En esa ocasión el diputado Carlos Martínez Aké, que había calificado como precipitada la decisión de Zavala Salazar del expulsar al alcalde, volvió a arremeter contra su dirigencia estatal.

El 22 de julio pasado, mientras estaba en la ciudad Andrés Manuel López Obrador, otra diputada de Morena, Andrea Martínez reventó ante los medios que se iría del partido, y nuevamente arremetió contra Manuel Zavala, a quien acusó de separarla y distanciarla y ni siquiera invitarla al evento con el precandidato a la presidencia.

Prometido y cumplido, hace unos días, Andrea Martínez advirtió que para el próximo periodo se declara independiente porque no quiere seguir formando parte de un partido que la excluye.

Los problemas con Martínez comenzaron también en diciembre pasado cuando la dirigencia estatal recriminó que aprobara la Ley de Ingresos y Egresos del Gobierno del Estado para 2016.

En una reunión interna los entonces tres diputados de Morena habían acordado votar en contra de los dos proyectos, en el momento de la votación, Martínez votó a favor y levantó la ira del dirigente estatal y de sus compañeros de bancada que siguieron al pie de la letra el decálogo de Morena que afirma que los militantes de este partido serían sancionados si avalan propuestas de gobiernos priístas, panistas o perredistas, partidos que integraron el “Pacto por México”.

Martínez, compañera de la senadora Layda Sansores desde el movimiento de 1997, anuncia su retiro del partido. En menos de un año, Morena perdió un alcalde, dos diputadas y el grupo parlamentario que integraban.

¿Lamentable? Mucho.

Morena representa una opción política en México. Una opción real que tiene simpatizantes que no se deben subestimarse y menos despreciar ni numéricamente ni en su compromiso con su ideología.

¿Todos los partidos políticos hacen lo posible por seducir o destruir a Morena? Sí. En todo el país ocurre.

¿En todo el país lo logran? No. Morena es un partido marginado por la clase política pero no siempre han tenido éxito en fragmentarla.

Allí donde hay poca estatura política es donde Morena está en medio de crisis desestabilizadoras.

Zavala es un incapaz político.  Rodeado de un grupo que parece no logra detectar su incapacidad.

Zavala es un dirigente estatal  contextualizado en el siglo pasado. Destruyó lo que había ganado el partido por su baja estatura política.

Las victorias más importantes para la izquierda en Campeche, desde el 2006, se difuminan en las manos de un inepto.

El problema es de fondo, no si fuera PRD, Convergencia, Movimiento Ciudadano o Morena; no si es amarillo, naranja, o marrón, si incluye el águila o salió volando, la crisis está en el fondo.

Una crisis que no es aceptada porque en el horizonte de la dirigencia se privilegia la supervivencia de López Obrador y subestiman cualquier otro enfoque que los descapitalice políticamente.

Hay quienes ven a Zavala como un dirigente elocuente y combativo, otros no, lo ven como un aprovechado. Hay quienes lo describen como muy hábil, otros no, lo ven como un oportunista.

El camino que tome Morena en los próximos meses hablará mucho de lo que es y representa el lopezobradorismo en Campeche.

REPERTORIO

-Que no la den por “muerta”, Rocío empieza a asegurar que volverá a competir en Carmen.

-El Instituto de Transporte de Campeche enfrenta a la empresa Uber México. El round va 0 a 0.

-Que una de las cuatro candidatas al PRI municipal de Campeche está buscando apoyos de los sectores. ¿Le alcanzará?

-Que diputados del PRI no se ponen de acuerdo sobre si harán un solo informe o cada uno por separado.