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El ídolo pop se tatuó el ojo de su mamá en el brazo. Muchas canciones románticas hablan de que el amor puede causar el más grande de los dolores, y aunque Justin Bieber es muy joven para poder asegurar ese tipo de expresiones, con su último acto lo puede demostrar, y muy gráficamente.
El cantante canadiense se tatuó un gran ojo en su brazo, pero no cualquier ojo, sino el de su progenitora.
Según declaraciones de Keith McCurdy, artista creador del último tatuaje de Bieber, el ídolo pop le explicó el tatuaje como una manera de homenajear la continua protección que le brinda su madre.
“Justin me contó que el tatuaje significa que su mamá siempre lo está observando. Es algo que habla sobre la protección que le da”, declaró McCurdy al New York Post.
Por el tamaño del tatuaje y el tiempo que Justin estuvo soportando el dolor que implica este tipo de procedimientos podemos asegurar que eso es amor… ¿O acaso es una forma de pedir disculpas públicamente por hacer cosas como ésta?