“La pandemia de Covid-19 es un grito de Dios a la humanidad ante el desorden social, el aborto, la violencia, la corrupción, la eutanasia y la homosexualidad”, sostuvo Ramón Castro Castro, obispo de la Diócesis de Cuernavaca, durante la última homilía con población ante la Jornada Nacional de Sana Distancia que se han iniciado en México como forma preventiva en la emergencia sanitaria por el nuevo coronavirus.

Desde la Catedral de Cuernavaca, el jerarca convocó a los feligreses a reflexionar sobre las barreras que ha roto el virus Covid-19, “mostrando la vulnerabilidad sin importa el color, ni clase social”.

“Fíjense que interesante negros y blancos, ateos y con fe, pobres y ricos todos estamos igualitos, se está deteniendo a la humanidad, queramos o no queramos, tengas dinero o no tengas dinero. Es interesante como un microscópico virus viene a decirle a la humanidad: ‘¡Hey! Eres frágil, eres vulnerable, ni tu dinero ni tu poder ni tu éxito te van a ayudar, ¡date cuenta quién eres! No juegues a ser Dios’”, dijo.

El Obispo de Cuernavaca continuó “la humanidad ha querido jugar a ser Dios y a determinar quién vive. Fíjense en 2019, 50 millones de abortos en el mundo y el ser humano a gusto y proclamando su pseudolibertad, esos son hijos de Dios y los hemos asesinado y el ser humano como si nada”.

Y agregó: “La corrupción, la violencia, los robos y nos vamos acostumbrado a esto. La eutanasia: ya me cansé de sufrir que me mate o los niños que están muy graves los papás en Holanda y Bélgica pueden decidir que los maten. Que se esperen los niños a ver qué género quieren ser, que un niño decida que quiere ser niña y una niña decida que quiere ser niño. ¡Ah, caray! Seguramente Dios dice: ‘¿A ver hijos a dónde van? ¡Momentito, momentito se están yendo a un abismo’. Nos quiere y nos ama pero nos está diciendo cuidado hijos”.

Castro Castro alertó sobre la crisis económica que vendrá. “La situación económica será terrible, se nos viene una crisis, se nos van a multiplicar necesidades. No olvidemos a los pobres, hay que ser solidarios, se nos va a venir una situación gravísima, 50 por ciento de nuestra población vive al día”.

Finalmente, el obispo de Cuernavaca pidió a los le feligreses a orar por los enfermos, pero también los exhortó a seguir la transmisión de las ceremonias religiosas a través de sus redes sociales, debido a que se suspenderán las misas con la participación del pueblo hasta que pase la fase crítica del coronavirus Covid-19.

Agencias.