El gobierno que pregona el cambio, gobierna con los mismos. Ayer se supo que otros dos exfuncionarios priístas fueron nombrados en cargos públicos por Morena, priístas purificados por Layda Sansores, priístas que desplazan a morenistas de a pie que se quedaron en la banca esperando recompensa a su trabajo partidista en campaña.
Armando Toledo, Raúl Pozos, Renato Sales, Vania Kelleher, titulares de la SDR, Sedesore, FGE y Sectur, respectivamente, por decir algunos de sus cargos en gobiernos priístas, son hoy algunos de los nombres con mayor perfil en el actual gobierno morenista de Layda Sansores, como Jefe de la Oficina de la Gobernadora, Secretario de Educación, Fiscal General, Directora del Instituto de la Mujer, respectivamente.
Ayer se sumaron dos más: Landy Berzunza, exdiputada priísta, y Víctor Salinas, exdelegado de Sagarpa, secretario del gobernador y senador de la República, sin olvidar su presidencia estatal del PRI, hoy forman parte de la estructura administrativa de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario que, por cierto, dirige también otro expriísta: Ramón Ochoa Peña.
Esta es la cuota del PRI. Del PRI de Fernando Ortega Bernés en la 4T de Morena, ese gobierno que pactó políticamente con ese viejo PRI que hoy tiene espacios en la nómina estatal, mientras los morenistas de a pie, que trabajaron en campaña, los que sudaron en recorridos, siguen esperando turno.
Apenas ayer, la titular de Seproci, Bertha Pérez, admitió que está pidiendo más presupuesto y personal para poder meter en la nómina a los que impulsaron el triunfo de Morena y que hoy siguen en la banca porque no hay espacios, pues muchos los siguen acaparando los priístas.
Cabe mencionar que los funcionarios priísta-morenistas mencionados, son sólo los más destacados en cuanto a jerarquía de cargos públicos, porque en mandos medios y bajos hay aún más priístas y puruxistas pululando en las arcas de Morena.
Jorge Pérez.