El Partido Acción Nacional (PAN) en Campeche se convirtió lo que tanto criticaron; ser el partido satélite y morralla de Morena y su 4T, rechazado y negando su alianza con el Revolucionario Institucional.

Desde el Congreso del Estado, los dos diputados del PAN, Pedro Cámara Castillo y Leidy Keb Ayala, se volvieron unos esquiroles, alzando la mano a todo lo que diga y proponga la bancada de Morena comandada por Alejandro Gómez Cazarín.

Muy lejos está de lo que representa ser oposición, pues desde que llegó a la 64 Legislatura en octubre pasado, Cámara Castillo ha aprobado todas las reformas que Morena ha presentado, pero también votando en contra de las que propone el PRI y Movimiento Ciudadano.

Claro ejemplo fue el tema del Presupuesto de Egresos del Estado, en diciembre de 2021, donde se presentaron recortes de recursos que han repercutido de manera significativa, como es el caso del Instituto Electoral del Estado de Campeche.

Otro ejemplo fue la Ley de Amnistía, que fue aprobada con 20 votos a favor (16 de Morena, 2 del PAN y el resto fue de los diputados rebeldes de Movimiento Ciudadano), que pone en libertad a delincuentes.

No sólo fue en reformas, sino también el PAN ha ayudado a que se fomente la opacidad y que no haya rendición de cuentas en el estado de Campeche, como el caso de las renuncias del extitular de la Auditoría Superior del Estado, Jorge Arcila R. de la Gala, y recientemente el caso de la hoy exfiscal Anticorrupción, Silvia Moguel Ortiz.

Redacción.

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