Ni Layda busca justicia, ni Alito espera un juicio justo por parte de la bancada y el gobierno morenistas. Por el contrario, ante la solicitud de desafuero presentada ayer por el fiscal estatal Renato Sales Heredia, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, afirmó que lo que ve venir es una venganza, pero a la vez reiteró que no caerá en el juego de la 4T que sólo busca obligarlo a “negociar en lo oscurito” las reformas que, a criterio de la oposición, sólo serán para destruir al país.

Y es que Sales Heredia, al acudir a la Cámara de Diputados, en la CDMX para presentar la solicitud de desafuero, se apresuró a explicar que “no es un acto político en contra de un opositor”, pero se le ovldió mencionar que Alito fue juzgado y exonerado por la Fiscalía General de la República en octubre de 2020 por el mismo delito  por el que hoy lo persigue el Gobierno de Campeche, tras una denuncia del exgobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz.

Si consideramos que la ley señala que en México nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito, la intentona del fiscal cae en el terreno político y no judicial, y el motivo sería evidente: Moreno se ha convertido en el principal opositor al Gobierno mexicano y en el actor político que aglutina a toda la oposición que ha presentado un firme rechazo a las reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Mejor prueba no hay: Los ataques a Alito comenzaron justo después de que la reforma eléctrica fue rechazada por la Cámara baja, pues Morena requiere una mayoría calificada y sin el PRI ni los diputados de la alianza Va x México, no la tiene.

No hay que olvidar que la 4T tiene en puerta otras reformas urgentes, como la política, en la que se incluye la desaparición del INE y sin el PRI de Alito y sin la oposición que representa, la reforma no pasará.

En ese sentido fue la respuesta del dirigente priísta a la solicitud de desafuero presentada por Sales Heredia:  “Aquí estoy y aquí seguiré. No van a doblarme. No me van a asustar, ni van a conseguir que el PRI apruebe las reformas que pretenden destruir a México”, señaló en un video difundido en sus redes sociales.

De Morena no espero justicia, “espero venganza. Me amenazaron con que se dajarían venir con todo y lo están cumpliendo”, dijo.

Recordó que el Gobierno Federal, Morena y la 4T, lo han perseguido, espiado y amenazado, y ahora lo quieren desaforar.

“Como priista, como opositor y como mexicano, confío en las instituciones y en el marco legal de México que ellos pretenden pisotear para silenciar a quienes señalamos su desastre”, refirió.

Tras recibir la solicitud de desafuero, la Cámara de Diputados deberá instaurar una Sección Instrutora, que deberá dar voz a la FGE y a Moreno Cárdenas para sus alegatos, depués iniciar un debate sobre el particular y someterlo a votación. Con una mayoría simple, es decir, la mitad más uno, lo podrán lograr, cifra que actualmente sí reúne Morena y sus aliados.

“Esta maniobra es congruente con las dictaduras del mundo y es otro intento de desviar la atención de lo que ocurre en nuestro país”, indicó Alito.

Redacción.

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