Sin la posibilidad de recurrir a Uber o cualquier plataforma de servicio de transporte, los campechanos tenemos que conformarnos con el Sindicato Único de Trabajadores del Volante (FUTV) por una ley retrógrada y clientelar que el actual Gobierno estatal no ha podido o querido modernizar. Pero bloquear o estorbar las intenciones de un grupo de taxistas de mejorar su servicio, eso ya es demasiado.

Y eso es lo que está ocurriendo actualmente en la ciudad. Este fin de semana se puso en operación una App denominada Bin.

Fue creada por los mismos taxistas. Permite conocer al conductor, el tipo de vehículo, la ruta que llevará y el costo del servicio desde antes que el ciudadano aborde el automóvil.

Y eso ya es mucho más de lo que los campechanos hemos tenido nunca jamás en el servicio de transporte urbano.

Pero, como si estuviéramos en el mundo al revés, es el propio Instituto Estatal del Transporte (IET) el que se opuso y publicó que Bin no está autorizada. Además, tratando de generar miedo entre los usuarios, señaló que quien haga uso de la App podría poner en riesgo su seguridad.

Dichas declaraciones fueron desmentidas por los taxistas. Informaron que su App es segura y utilizada sólo por taxistas con concesión, y añadieron que el IET tiene conocimiento de ella desde hace dos años, pero se ha negado a autorizarla.

Wilmer Delgado.