Con motivo de la graduación de la vigésima cuarta generación de la Policía Estatal, en la que se incorporaron 93 nuevos cadetes, la secretaria de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC), Marcela Muñoz Martínez, ordenó montar un espectáculo con ejercicios de destreza y simulacros de un rescate de rehenes.
Fue un bonito show celebrado en la zona embutida de la Dársena de San Francisco, con hombres dando el salto del tigre sobre un aro en llamas, o a bordo de una motocicleta en un giro de la muerte. También hubo una escenificación de un secuestro, con rescate de rehenes e inmovilización de los secuestradores y toda la cosa. Hollywood no le pedía nada al espectáculo.
Fue un show para lucirse, con una sonriente y aplaudidora Marcela Muñoz Martínez, que lucía muy relajada tras su viaje de casi 20 días por Europa.
No era para menos. 93 nuevos cadetes, 44 mujeres, 49 hombres. 47 con licenciatura, 46 con bachillerato concluido. Capacitados durante cinco meses o 972 horas, con becas de 2 mil pesos.
Pero el problema es que los campechanos no queremos más show. Ese show que hemos recibido en lugar de resultados de gobierno desde el inicio de la actual administración estatal.
Y, en el ramo de seguridad, no hay resultados mucho menos. Ejecución tras ejecución, balacera tras balacera, poco a poco se ha ido metiendo el crimen organizado en nuestra capital y eso no lo puede borrar ni hacer olvidar un bonito espectáculo practicado durante cinco meses.
Y no lo puede hacer olvidar porque la realidad que esos cadetes se encontrarán en las calles es una guerra entre bandas de narcomenudeo que se disputan la plaza sin que la SPSC haya metido las manos para estorbar esa cruenta guerra.
Redacción.