Médicos, enfermeros, camilleros y trabajadores sociales se manifestaron ayer en las instalaciones del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), luego de que fueran convocados para firmar su contrato pero se les informó que no van a poder cobrar hasta el próximo mes de abril. Molestos, manifestaron que ese es su único ingreso y sin su salario no podrán sobrevivir ni permanecer en sus puestos por tanto tiempo.

Un amplio grupo de personal médico se manifestó en el edificio, inconforme con el anuncio de que no recibirán sus salarios sino hasta dentro de cuatro meses.

Esta información se obtuvo mediante mucha insistencia, puesto que los trabajadores de la salud mencionaron que fueron amenazados por las autoridades del sector de que si lo ventilaban en la prensa serían despedidos.

Explicaron que el argumento de las autoridades es que su pago se hace con recursos federales, y la Federación libera el recurso hasta el mes de abril, cuando se les pagará.

Además también denunciaron que muchos de los trabajadores se van a quedar sin contrato, pues no se los renovaron, entre ellos se cuenta a odontólogos, camilleros, enfermeros, médicos y trabajadores sociales, aunque algunos afirmarán hasta enero, febrero o marzo.

Dijeron que son más de 500 trabajadores de la salud que están en total incertidumbre, desde médicos hasta enfermeros, camilleros, trabajadores sociales y odontólogos, porque no saben qué van a pasar con ellos, si los van a volver a contratar o no.

Comentaron que quedarse sin contrato o pagarles hasta el próximo año, sería una situación preocupante porque se quedan sin su sueldo, el cual es además precario, ganando 2 mil 400 pesos a la quincena y sin prestaciones.

Señalaron que todo esto se debe a la homologación de los servicios de salud, con el Insabi, que sólo vino a afectar a los trabajadores, y por ello les están renovando sus contratos en los diferentes centros de salud del estado, pero a muchos quedarán fuera en medio de esta reorganización.

En el lugar se pudieron ver rostros llenos de angustia, trabajadores que han dado todo su esfuerzo y tiempo para atender a la población, pero las decisiones políticas y administrativas del gobierno actual los tiene contra la lona en el aspecto laboral.

Nunca había pasado esto. No de esta manera. Las cosas están difíciles. No se ve nada bien. Los jefes se dan la gran vida y nosotros nos quedamos en las peores condiciones, dijeron.

Wilmer Delgado.

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