La Fiscalía General del Estado presumió este domingo en sus redes sociales la detención de un menonita conocido como Pancho Loco, “generador de la violencia en la región” del Valle de Edzná, que incluye a Bonfil, Laureles, Pich y alrededores.

No dijo cómo, ni cuándo, ni dónde lo detuvo. Mucho menos cuáles son los argumentos o pruebas por las que concluyó que él es el responsable de la balacera en Bonfil, de la narcofosa en Laureles, del asalto a la gasolinera de la región o del secuestro de jóvenes en Pich. Para variar, todo lo dejó en la opacidad.

Pero lo que sí sabemos, con pruebas, es que la Fiscalía de Renato Sales Heredia conocía muy bien que Pancho Loco era el líder de una célula independiente del narcotráfico, encargado de la logística para el aterrizaje de narcoavionetas y quien asolaba a toda la región de los Chenes y Valle de Edzná.

Lo sabía por lo menos desde octubre pasado. Antes de todos los acontecimientos de violencia que se han suscitado desde entonces.

Fue en septiembre del 2022, en el marco de una gira del Presidente Andrés Manuel López Obrador a la Península de Yucatán, que el grupo de hakctivistas conocido como Guacamaya Leaks difundió millones de documentos clasificados  de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) entre los que se encontraba un reporte denominado ‘Campo Delictivo Estado de Campeche’.

La información fue retomada desde el mes de octubre por medios como Reforma, El Universal, Infobae, Latinus y, por supuesto, El EXPRESO de Campeche, en donde se detalla la información de documentos clasificados extraídos de la Sedena.

Por Guacamaya Leaks, los medios supimos que en Campeche tienen presencia el Cártel del Pacífico; el grupo Pura Gente Nueva, vinculada al Cártel de Sinaloa; el grupo Familia Valencia Salgado, ligada a la Familia Michoacana; así como células independientes vinculadas a nombres como la Familia Farías González y Farías Bailón -¿les suena a alcalde y exalcalde de Candelaria?-, Francisco Ferrer Kuri alias El Panchillo; y Franz Kauenhofen Wiebe, un menonita conocido como Pancho Loco.

Sí, el mismo Pancho Loco que ayer la FGE informó de su detención, la cual no ocurrió sino hasta cuatro meses después de filtrarse esa información y luego de por lo menos 10 muertes dolosas y tres desapariciones forzadas en la región que el menonita controlaba.

Y de inmediato, ante la falta de información del fiscal Renato Sales Heredia, surgen, de forma natural, los cuestionamientos:

¿Dónde, cuándo y cómo detuvieron al menonita?

¿Cuáles son los elementos que lo ligan a la “violencia en dicha región”, y con ello se refiere a la balacera en Bonfil, la narcofosa en Laureles y el asalto a la gasolinera que dejó dos muertos, además de tres secuestros?

¿Si lo detienen ahora, por qué no se actuó antes de que ocurrieran todas estas desgracias?

Wilmer Delgado.