El presidente estadounidense, Joe Biden, tiene planes de declarar una emergencia climática en el país y dar prioridad a una agenda ambiental, a pesar del estancamiento en las conversaciones con el Senado sobre este proyecto.

Esta medida se presenta luego de que el senador Joe Manchin III no aceptara los esfuerzos de los demócratas para promover un paquete económico que incluye millones de dólares para enfrentar el calentamiento global.

Declarando una emergencia, Biden podría obtener poder para reducir emisiones de carbono y promover tácticas para obtener una energía más limpia.

De acuerdo con la Casa Blanca, Biden podría hacer este anuncio durante su discurso sobre el cambio climático en Massachusetts, donde hablará de cómo hacer frente a la crisis climática y cómo las energías limpias crearían empleos y reducirían costos a las familias.

Entre los que han cabildeado en la Casa Blanca en los últimos días para invocar la declaración de emergencia, que fue utilizada por el expresidente Donald Trump para comenzar la construcción de un muro fronterizo, está el senador demócrata Ed Markey de Massachusetts, autor del Green New Deal.

“Expuse mi caso de que es hora de una acción urgente”, dijo Markey el lunes. “Espero que sus acciones sean tan audaces como lo requiere el problema”. 

La población y activistas han pedido que el gobierno tome medidas ante las altas temperaturas, como detener exportaciones de crudo o limitar la perforación para obtener petróleo y gas, medidas que se contraponen al esfuerzo del presidente para luchar contra el alza en los precios de la gasolina.

FUERTES TEMPERATURAS AZOTAN A EU

El excesivo calor afecta a gran parte de Estados Unidos con temperaturas por encima de los 34 grados Celsius de costa a costa, y de hasta 44 grados en el sur y centro del país, según el Servicio Meteorológico Nacional.

“El calor peligroso continuará durante la mitad de la semana”, advirtió el NWS.

Más de 100 millones de personas viven en regiones expuestas  a temperaturas excesivamente altas, “mientras que un frente frío que avanza hacia el sur podría traer un alivio relativo en las planicies centrales”.

Las ciudades estadunidenses que son más afectadas por la temperatura son Oklahoma, con más de 44 grados, Phoenix con más de 43 grados y Texas con temperaturas por encima de los 38 grados.

Agencias.

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