Disfrutando la victoria. Uriel Adriano

AGENCIAS

Puebla, Pue.- El mexicano Uriel Adriano se convirtió en campeón del mundo en la justa que se realiza en el Centro Expositor de Puebla y de esta manera terminó con la sequía de 34 años en los que ningún taekwondoín varonil subía a lo más alto del podio.

Después de haber ganado la final de la categoría de menos de 74 kilogramos y haber dado la vuelta olímpica en el complejo donde se realizan los combates, Adriano indicó que su pelea más difícil fue contra el británico Ruebyn Richards en cuartos de final y que después de ese obstáculo y de haber asegurado la medalla, ya no tenía nada que perder en el evento.

El local no se achicó ante el coreano Yoo-Jin Kim en la semifinal, a quien en el segundo round le propinó una patada en la cara para irse con la ventaja de 5-2 después de terminar el primero 2-2, y ante el apoyo del público, Uriel se dedicó a defender sus puntos.

Después de ello, el nacional salió muy motivado para la final ante el ruso Albert Gaun donde el azteca en el primero se encontraba abajo en el marcador 0-1.

Sin embargo, Adriano nunca perdió la concentración, mantuvo la guardia y estuvo atacando en el segundo round, pero no cayó el empate y el parcial se mantenía igual al finalizar esa etapa.

Llegó el round final y la gente quería escuchar el himno nacional, por lo que empezó el ‘sí se puede’, con la motivación, Adriano se lanzó al ataque y descontó al ruso para empatar 1-1.

El europeo de inmediato respondió para recuperar la ventaja, Uriel no se desconcentró ni se desesperó y espero el momento para dar una patada de giro frontal, la cual le resultó y le dio dos puntos para irse arriba del parcial por 3-2 y a pocos segundos de terminar la pelea.

El ruso atacó con desesperación, pero ya no pudo e incluso su coach pidió la revisión de una patada a la cara hacía Adriano cuando ya el reloj marcaba cero en el tercer round.

Mientras los jueces revisaban, el público comenzaba a festejar, los taekwondoínes se saludaban en el tatami y el árbitro le dio poco después el triunfo a Uriel.

“Fue un sueño que se me hizo realidad y se ha visto que no me quedé estancado después de haber ganado la plata en los Juegos Panamericanos de Guadalajara, ahora soy campeón del mundo”, declaró Adriano.

Hace historia

Así, el tamaulipeco volvió a conseguir un oro para un taekwondoín mexicano después de que en 1979 Óscar Mendiola fuera el primero y el último en hacerlo.

“Lo había pensado desde años atrás y fue un objetivo que me planteé desde que estuve en Dinamarca, quería ser campeón del mundo y ese ha sido el sueño desde que estaba chico y ya se cumplió. La clave para tener este oro fue ganarle al inglés, donde ya estaba un poco lastimado, pero después de asegurar una medalla, a mí ya no me importaba eso, quería dejarlo todo en el tatami”, explicó.

Mientras tanto, el presidente de la Federación Mexicana de Taekwondo, Juan Manuel López no dejó de expresar su sentir tras lo realizado por el nacido en Ciudad Victoria que se suma al bronce de Damián Villa.

“Fue un oro muy sufrido, muy vivido y es un gran logro para el trabajo que han hecho él y los entrenadores. Hay que gozar este triunfo, ya que esto es histórico y es un triunfo para México y gracias a un gran trabajo de todos sus entrenadores, de In Youn Bang y de Rosendo Alonso ya que a veces se nos olvida que los muchachos tienen a alguien que los enseña, que los trabaja y los cuida”, concluyó López.

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