Luego de un fin de semana en que los morenistas se volcaron en apoyo a sus tres precandidatos presidenciales oficiales y en que tránsfugas del PRI y PAN respaldaron a un cuarto en discordia, el dirigente estatal de Morena, Erick Reyes León, admitió que una ruptura en el partido guinda es una posibilidad real, de cara a la sucesión presidencial del 2024.

Como se recordará, ayer EL EXPRESO publicó que todos los funcionarios estatales de Morena volaron al Estado de México para apoyar, en lo que fue un acto anticipado por la candiatura presidencial, a Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, que buscan suceder a AMLO en la elección presidencial. Sin embargo, en un claro mensaje político, los expanistas y expriístas que dieron su apoyo a Morena en el 2021 se quedaron aquí para apoyar a Ricardo Monreal, el presidente del Senado morenista, quien se vende a sí mismo como la alternativa “democrática” del oficialismo morenista.

Para el líder estatal del partido guinda, esto es un antecedente de unaposible división del partido.

Y aunque criticó a Monreal Ávila por decir que es parte de Morena pero buscar el apoyo de exmiltantes de otros partidos, reconoció que sí podría llevar a una ruptura, lo que debilitaría a Morena en la elección presidencial.

Recordó que Monreal ya en el 2017 generó una crisis interna en el partido al no aceptar los resultados de las encuestas para decidir candidatos, y lo podría volver a hacer.

Redacción.