Una distinción, al igual que una gran responsabilidad, la que tuviera Campeche al haber sido sede el pasado miércoles 4 de la primera reunión regional del país, que correspondió a la zona sur-sureste conformada por 8 estados, entre ellos el nuestro.
Un bien organizado equipo se dio a la tarea de llevar a cabo un excelente trabajo para el buen desarrollo de ese evento. En el marco de nuestra ciudad capital, teniendo como anfitrión al gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, estuvieron presentes los gobernadores de la región sur-sureste, junto con los responsables educativos de sus entidades. Al igual se destacó la presencia de Aurelio Nuño Mayer, secretario de Educación Publica, quien a nivel nacional coordina en estrecha relación con los mandatarios de todas las entidades federativas, la puesta en marcha de la Reforma Educativa como piedra angular, por su importancia, de ese mejor México que el presidente Peña Nieto se ha propuesto hacer realidad.
Histórico ese encuentro que para el fortalecimiento de esa Reforma Educativa se iniciara con esa primera jornada de intercambios que se repetirán en las otras 4 regiones que integran a las demás entidades federativas. Vaya que llamaron la atención las temáticas aprobadas para su ejecución: fortalecimiento de la escuela; infraestructura, equipamiento y materiales educativos; desarrollo profesional docente; revisión de los planes y programas de estudio; equidad e inclusión; vinculación entre educación y mercado laboral; reforma administrativa.
Los acuerdos fueron producto de planteamientos acerca de la realidad educativa percibida, en este caso de la región Sur-Sureste, tan compleja, heterogénea y difícil. Las decisiones tomadas habrán de definir parte del rumbo a seguir por esta reforma en su camino hacia su plena consolidación. Cada 4 meses, así se acordó, en sedes que habrán de señalarse con oportunidad, tendrán lugar reuniones semejantes a las de Campeche, para dar cumplimiento a los acuerdos tomados en este arranque de trabajos regionales en que nuestro estado fuera distinguido como primera sede de estos eventos.
Seguramente ahora, con un proyecto previo de acciones planificadas y consensadas entre las autoridades centrales de la SEP con los gobiernos de todas las entidades de la Republica, la Reforma Educativa transitará más segura, efectiva y apreciada, no solo por el magisterio nacional, sino por la sociedad mexicana en su conjunto que ha demandado desde tiempo atrás una mejor atención y resultados de calidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje que tiene lugar en las aulas de las escuelas, que aún en los más apartados lugares se ubican por toda la geografía nacional.
No arredrarse jamás ante los retos es una actitud que los mexicanos de hoy, quienes reclaman mejores oportunidades, exigen. Por ello el apoyo a la Reforma Educativa, por lo que representa en favor de convertir ese sueño de tanto tiempo de mejores resultados, cuenta con la inquebrantable decisión del presidente Peña Nieto y los gobernadores, para que ahora sí, sin más mañanas de frustrantes esperas, la gran cruzada por una mejor educación para los mexicanos se haga en convencida unidad.
Otros tiempos estos, el gobernador Moreno Cárdenas fue determinante al señalar que “la Reforma Educativa permitirá que nuevas generaciones de mexicanos triunfen por sus talentos y compitan en el mundo globalizado. Si triunfa la Reforma, triunfa México y los miles de niños y jóvenes que serán educados bajo nuevos estándares de calidad”.
El México al que la dinámica tan acelerada de los cambios que este siglo XXI ha puesto por sus riesgos, al filo de la navaja, ya no espera silente como antes el cumplimiento de nuevos resultados, en tiempos imprecisos; los exige ahora más a corto plazo, con definiciones de cómo y cuándo, evaluables. La niñez y juventud han dejado de ser tan solo un romántico futuro, para convertirse hoy en un presente de obligados resultados de calidad ya que sin ellos de nada servirían las enseñanzas que reciban, cuando al concluir sus estudios pasen por el tamiz de las exigencias del mercado laboral.
La presencia de Aurelio Nuño Mayer, Secretario de Educación Publica en estos trabajos de análisis y toma de decisiones consensadas es muestra inequívoca de su compromiso de cumplir a cabalidad con la encomienda que le hiciera el presidente Peña Nieto, de sacar adelante la Reforma Educativa. Por ello, desde sus inicios en la SEP, ha sido permanente su interés de buscar y lograr un trabajo en equipo, corresponsable, entre las autoridades educativas centrales y sus pares en los estados, con el decidido apoyo de los gobernadores. México parece en educación, despertar de un anquilosante letargo cuyas consecuencias han impedido el aprovechamiento cabal de sus potencialidades.
La apuesta por lograr una educación de calidad involucra a todos los mexicanos. Esa es la importancia de dar a cada entidad, en sus distintas regiones, voz respetada y atendida a las necesidades que ahí se vivan, y se sientan. Las suma de todas las partes permitirá no solo un diagnóstico más actual de la educación mexicana, sino el diseño de estrategias que permitan resultados de excelencia en los distintos subsistemas educativos.
Una primera y alentadora muestra de corresponsable unidad en cuanto a propósitos para apoyar la Reforma Educativa fueron los Acuerdos dados a conocer al final de esa primera reunión, por el gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, con la representación de sus homólogos asistentes. Todo inicio implica señalamientos y reflexiones que abren a la posteridad las puertas de la historia a los análisis que toda obra genera. La Declaración de Campeche, por su importante contenido, vale la pena conocerse a fondo y reflexionarse por sus características de marco normativo referencial. En su mensaje de apertura, en la mañana del miércoles 4 de noviembre, el Gobernador Moreno Cárdenas señaló que la barca de la Reforma Educativa, construida a conciencia con el esfuerzo capaz y convencido de la unidad, había zarpado ya. Los retos, hizo énfasis, no detendrán su camino. Educar, dijo, es como navegar a contracorriente, porque si se deja de remar, retrocederemos todos…