Una de las muchas debilidades del actual gobierno estatal es la inseguridad. Y, como en sus demás fracasos, la administración morenista sigue culpando a los gobiernos predecesores, pese a que ya ha pasado más de un año desde que asumió el poder, su año diagnóstico, como le llamó.

No hay mejor ejemplo de ello que el discurso del fiscal estatal Renato Sales Heredia, quien en una entrevista con el diario Reforma insistió en que no es que estén subiendo las tasas de delincuencia y criminalidad, sino que los gobiernos anteriores no los reportaban bien.

El problema con ese argumento es que es el mismo que dijo durante su primer trimestre al frente de la FGE. En diciembre de 2021, cuando se dispararon todos los reportes oficiales, Renato Sales Heredia argumentó que el motivo era que ahora sí se integraban las carpetas de investigación y se subían las estadísticas.

Pero hoy, un año después, Sales sigue dando los mismos argumentos a los medios nacionales, mientras que los índices de inseguridad no han parado de incrementarse: De enero a agosto de este 2022, se cometieron en Campeche 16 mil 786 delitos, cuando en el mismo periodo del 2021 se cometieron apenas mil 470.

Se trata de una gran diferencia que ni Renato ni el Gobierno estatal ni Morena ni la 4T han podido detener, o al menos frenar un poco.

Por el contrario, los campechanos de a pie son los que viven cada día nuevas escenas de delincuencia, muchas veces en la puerta misma de sus hogares.

¿Hasta cuándo el Gobierno morenista va a seguir culpando al pasado por su falta de resultados y concentrarese en trabajar?

Redacción.