Los episodios de violencia y delincuencia que cada vez con mayor frecuencia se suscitan ya no sólo en la región Sur, como Candelaria o Escárcega, sino incluso en la mera ciudad capital, parece que pasa desapercibida para los integrantes de la 4T y de Morena.

Ayer, el dirigente estatal de ese partido, Erick Reyes León, negó que los delitos estén yendo a la alza, y que ese aumento se haya propiciado luego de la llegada de Morena al Gobierno de Campeche, como dicen hasta las encuestas del propio gobierno morenista, pero a nivel federal.

Apenas el pasado domingo, un par de sicarios en motocicleta balearon en la puerta de su hogar a un ciudadano, en la colonia Sascalum, mientras que otra persona fue hallada muerta en la ranchería de Chulbac.

Y episodios como estos son los que se han venido repitiendo desde fines del año pasado y no han parado: ejecutados, incinerados, narcomantas…

Pese a ello, y a la ineficacia e ineficiencia tanto de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) como de la Fiscalía General del Estado (FGE), el gobierno morenista sigue cerrando los ojos a la realidad y asegura, insiste, promete en que todo marcha bien.

“Es muy lamentable (el crimen del domingo) pero confiemos en que la Fiscalía hará su trabajo, como lo ha venido haciendo”, dijo y negó que los delitos se hayan incrementado, que él sea el único que cree eso.

Wilmer Delgado.