El Gobierno del Estado no quiso subsidiar a las familias campechanas el cobro por el reemplacamiento vehicular “porque afectaría sus finanzas” y prefirió afectar las finanzas de los ciudadanos, de los que menos tienen, y lo hace en el inicio de un año muy complejo por los incrementos en diversos productos, reprochó el coordinador del Grupo Parlamentario del PRI en el Congreso del Estado, Ricardo Medina Farfán.

El miércoles, el Gobierno del Estado anunció que el canje de placas 2023 tendrá un costo de 1,298 pesos para autos, rechazando así la propuesta del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para que se exente del pago de placas a propietarios de vehículos de bajo precio.

En entrevista, Medina Farfán explicó que como grupo parlamentario el PRI presentó la propuesta al Congreso del Estrado para subsidiar el pago del canje de placas, dado que el inicio de año se avizora complejo y de un impacto económico importante para las familias campechanas.

Detalló que el 2022 cierra con una inflación muy alta, con incremento en la canasta básica, combustibles, energía eléctrica, con una economía que no despega, con mucho desempleo y bajo salario, “si a todo esto se le agrega que al inicio de año se tiene que dar el pago del canje de placas 2023 entonces se va a complicar la vida a muchas familias campechanas”, dijo.

Medina dijo que no están en contra del reemplacamiento,  pues se debe mantener el orden en el control vehicular por ser sano y positivo para la ciudadanía, pero agregar un cobro más a las familias es ponerlas en una situación grave, complicada, de riesgo a la economía familiar.

“Por eso se planteó que a las familias de menores ingresos, cuyo vehículo sea de menor costo, pudieran recibir el subsidio del canje de placas, para que no se afecte a los que menos tienen. No se pensaba que fuera para todos, sino simplemente orientar el subsidio a las familias con vehículos con menores costos para así los que menos tienen puedan de una u otra manera evitar una carga mayor”, expuso.

Afirmó que la propuesta no fue aceptada por el Gobierno de Morena, con el argumento de que eso afectaría a las finanzas del Gobierno del Estado.

Manifestó que el grupo parlamentario del PRI no ve como válido ese argumento puesto que hay muchos gastos supérfluos, como el destinado a propaganda, a comunicación social, rubros que no tienen ningún beneficio, como el gasto corriente, la burocracia, los viajes, viáticos de los funcionarios.

Finalmente señaló que el hecho de subsidiar a las familias de menores ingresos era para evitar un cobro impositivo y hubiera sido una buena medida y algo que representara una medida solidaria para las familias, pero simplemente los diputados de Morena no estuvieron de acuerdo, “eso revela cuánto es su compromiso con las personas que menos tienen”, concluyó.

El 2 de enero inicia el cobro de ese gravamen. El 1 de febrero aumentará el costo, de acuerdo la actualización del valor de las Unidades de Medida y Actualización.

Wilmer Delgado.

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