Vendedor de biblias mata a su amiga

Psicópata. Ambos se dedicaban a vender biblias, pero a él no le iba muy bien

AGENCIAS

Tijuana, Baja California.- Agentes de la Policía Ministerial capturaron un vendedor de biblias acusado de haber estrangulado con un cable eléctrico a una mujer, que era su amiga, luego de que sostuvieran una discusión y esta le espetara que como no vendía ni una sola biblia “era un muerto de hambre”.

Se trata de Pablo Cenobio Peña, de 39 años de edad, quien era buscado como el presunto responsable del crimen; fue capturado por los agentes cuando regresó a la escena del crimen a recoger su mochila y evidencia que había dejado tras dar muerte a  Martha Carolina Castro Gaxiola, de 40  años de edad.

Los hechos ocurrieron la madrugada del pasado 26 de diciembre del 2013, cuando el cuerpo de la víctima fue localizado en su propio domicilio en el número 13750 de la calle Aurelio Garibay, de la colonia Camino Verde, en la delegación Sánchez Taboada, y como huellas de violencia presentaba estrangulamiento.

Las investigaciones realizadas por agentes de la Subprocuraduría Estatal Contra la Delincuencia Organizada permitieron su detención y establecer el móvil que lo llevó a cometer el homicidio.

Al rendir su declaración ante el Ministerio Público,  Cenobio Peña manifestó que efectivamente conocía a la víctima debido a que ambos eran compañeros de trabajo y se dedicaban a la venta de biblias, y que por la amistad que sostenían decidió rentar una vivienda cercana a la donde vivía la ahora occisa.

Relató que el día de los hechos, alrededor de la una de la mañana, los dos se encontraban en la habitación de Martha Carolina y fue entonces que ella comenzó a espetarle el hecho de que no vendiera ni una sola biblia, por lo que no tenía dinero, y de pronto le empezó a decir que “era un muerto de hambre”.

Esta cuestión enfureció al indiciado por lo que lleno de ira le dio un fuerte empujón a la mujer, quien cayó sobre la cama, dijo que posteriormente se le subió encima para inmovilizarla y tras de tomar un cable eléctrico, que encontró ahí cerca, se lo sujetó al cuello para apretarlo hasta que la privó de la vida.

Luego de cometido el crimen el hoy detenido emprendió la huida pero no contó que un familiar de la finada alcanzo a escuchar sus gritos y lo vio cuando salió corriendo del lugar y al presumir que algo había pasado se introdujo a la habitación de su tía y descubrió el cadáver de ella tirado sobre la cama.

Una vez más se cumplió la conseja de que “todo criminal regresa a la escena del crimen” y unas horas más tarde este fue el caso de Pablo Cenobio, quien no retornó por el remordimiento de haber matado a su amiga, sino porque se le había olvidado la mochila que utilizaba como herramienta de su trabajo.

Y es que pensó que la misma delataría su presencia en el lugar de los hechos, pero nunca imaginó que en ese lugar lo arrestarían los agentes de la Policía Ministerial del Estado que ya lo buscaban. Al momento de su detención al sujeto se le encontró en su poder un teléfono celular propiedad de dicha occisa.

Al detenido se le ejercitó la acción penal como posible autor del delito de homicidio calificado y tras una orden de aprehensión que se libró en su contra con carácter de urgente fue ingresado al Centro de Reinserción Social de “La Mesa”, quedando a disposición del titular del Juzgado de lo Penal en turno