Diputados continúan sin querer ver la realidad

REDACCIÓN
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Los diputados de la LXI Legislatura tienen mucho que retribuir. Se supone que son la voz de la ciudadanía ante el Congreso del Estado, el vínculo directo de los que con su “voto” los llevaron al cargo.

El diputado local del PRI, José Manrique, representa nada menos que a 26 unidades habitacionales, fraccionamientos y colonias, y en la mayoría de ellas ni siquiera lo conocen, según constató EL EXPRESO en un recorrido, un día después que se lo exhibiera por intentar sacarle rédito político a niños que el periódico La Opinión había presentado como anémicos.

La mayoría lo conoce porque la basura electoral que resultó de su campaña (lonas publicitarias) ahora sirven de tinglado o pared en muchos hogares humildes a los que no supo ayudar.

En el mismo recorrido por el Distrito ll la mayoría de las personas desconoce quién es su diputado; por el contrario, siempre recuerdan a los líderes de colonia; a los operadores políticos que trabajan para que caciquillos de poca monta, como Manrique, no sufran demasiado.

En la colonia Minas quien controla las gestiones y maneja los terrenos es “La Choca”; en otra zona de la misma colonia es don “Salvador” el dueño de una tortillería, por citar unos ejemplos. Ellos son los que critican la actitud de Manrique.

¿Tendrá el diputado del Distrito ll la capacidad para realizar las tareas de gestión en las más de 20 colonias en su resguardo?

Lo precario de la situación es alarmante y evidente: calles desechas, asentamientos irregulares que no cuentan con los servicios necesarios como energía eléctrica y agua potable, y en materia de vivienda ni se diga.

Lo urgente es la condición de muchos de los niños que viven en estas colonias. Algunos indicadores confirman la falta de crecimiento, que se aprecia en el peso corporal. ¿El motivo? La carencia de nutrientes necesarios durante un tiempo prolongado, hecho que hace vulnerables a los menores a contraer enfermedades que afecten su desarrollo físico e intelectual. De eso, el diputado no entiende.

Más allá de proselitismo político que solamente beneficia a su imagen, estos casos ponen al descubierto la situación por la atraviesa gran parte del territorio del estado y el Distrito II.

En la Colonia “Las Granjas” está Yapsel, una pequeña de 4 años de edad y con un peso de 11 kilogramos, 5 kilos menos del peso promedio de 15,05 kg. Con apenas 76 centímetros de estatura; y 34 centímetros por debajo de una media saludable de 99 centímetros.

En la Colonia Ampliación “Josefa Ortiz de Domínguez”, Victoria, de 4 años de edad,  pesa 11 kg. Nunca ha recibido apoyo.

En la Colonia “El Mirador” vive Hineydi, de 3 años; ella tiene un peso de 10 kilogramos y 62 centímetros. La madre está inscrita en la Cruzada contra el Hambre pero no recibió ayuda.

En la Colonia “Minas” está Sharely, de 3 años de edad, con una estatura 58 centímetros por debajo de la media con un promedio de 14 kg y 95 centímetros.

Esto solo por citar a algunas de las niñas y niños que se ven afectados por la carencia vitamínica derivada de una mala alimentación, pero de sobra se sabe que no son dos, tres o cuatro pequeños y pequeñas en este distrito viviendo en estas condiciones, sino decenas que diario se preguntan cuándo será el día que puedan comer como se debe.

LO QUE EXHIBEN LAS ESTADÍSTICAS

Una de las demarcaciones de Campeche que presenta casos evidentes de anemia y desnutrición infantil es el Distrito II. Ahí, tal y como lo detectó el Ranking Nacional de Nutrición Infantil, se tienen serios problemas y el representante ante el Congreso del estado, José Manrique, prefirió regalar 3 juguetes que promover o fomentar programas sociales serios y continuos.

Según los datos del Ranking Nacional de Nutrición Infantil, elaborado con datos de la Encuesta Nacional de Salud Pública (Ensanut 2012), Campeche tiene los registros más altos de anemia entre los niños menores de dos años. Según las cifras, nuestro estado tiene 34 por ciento de casos.

¿OPOSICIÓN?

Fue la oportunidad para que el principal partido de oposición del estado enviara un mensaje contundente… pero no fue así.

Ayer, al ser interrogados el presidente del Comité Directivo Municipal del PAN en Campeche, José Inurreta Borges, y la presidenta estatal del partido, Yolanda Valladares, dieron posturas diferentes sobre la raja política que sacó el diputado local tricolor José Manrique al regalar juguetes a niños con problemas de anemia en la colonia Ampliación Morelos.

Inurreta Borges respondió que el diputado Manrique ya es conocido por todos sus desatinos.

La Coordinadora del PAN Estatal, Yolanda Valladares justificó al diputado diciendo que es parte de su trabajo de gestión.

EN EL PRI NADIE CONTESTA NADA

Y en el PRI no hubo nadie. Ayer este rotativo acudió al Comité Directivo Estatal del partido para conocer una postura con respecto a las acciones de ‘ayuda’ del diputado por el Distrito II José Manrique. Simplemente no hubo directivos y la oficina de Comunicación Social tampoco respondió.

Lo anterior luego de la publicación de este rotativo el día martes donde se muestra que el diputado tricolor distrito lucra con la desgracia de las familias asentadas en la demarcación de Ampliación Morelos III, donde entregó juguetes a niños que sufren anemia y que habían sido parte de un reportaje extenso de La Opinión sobre graves problemas de alimentación.