Después de varios días, Manuel Bonilla respondió. El secretario general del sindicato del Ayuntamiento reclamó a Luis Chab al acusar que encabeza un “sindicato patito” que solo creó para “dividir, confundir, traicionar y afectar la estabilidad” de los trabajadores tanto del Ayuntamiento como de las autoridades de la Comuna.
Consultado por EL EXPRESO con respecto a los últimos acontecimientos ocurridos al interior del sindicalismo del Ayuntamiento, Bonilla Carrillo desmintió asimismo que a finales de este mes alrededor de 100 trabajadores más se afiliarían al Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Gobierno Municipal (SUTSGM) que encabeza Chab Ruiz.
El dirigente sindical de “Corazón Valiente” respondió enérgico a las preguntas de este rotativo en la sede del Ayuntamiento. Calificó a Chab Ruiz de traidor y causante de divisionismo entre los trabajadores del Ayuntamiento, al afirmar que es una mentira que se vayan a pasar 100 trabajadores más a finales de este mes.
“Es un sindicato patito. Yo nada más le preguntaría si tiene registro, si tiene estatutos, si tiene condiciones generales de trabajo. ¿En qué se basa cuándo logra un beneficio ante las autoridades si el que gestiona los pliegos petitorios es un servidor?”, preguntó con visible molestia.
Ayer, EL EXPRESO dio a conocer que Luis Chab sumará 100 trabajadores más a su gremio a fines de mes, en una muestra más de que los sindicalizados estarían en desacuerdo con las maniobras de Bonilla Carrillo, quien a fines de febrero de reeligió por seis años más, tras una cuestionada asamblea en la que habría pagado a gente ajena y que impidió el paso a una buena parte de agremiados del Ayuntamiento de Campeche.
Bonilla Carrillo fue todavía más allá ayer, cuando argumentó que “desgraciadamente, yo estoy trabajando para Luis Chab”, pues según su postura, todo lo que él logra es para beneficio de todos.
Sin embargo, Manuel Bonilla indicó que los trabajadores que renunciaron a “Corazón Valiente” violaron los estatutos en todos los niveles y que trataron de dividir la base, olvidando la manera arbitraria en la que fue reelecto, pasando por encima de la misma base y de los propios estatutos.
Además, durante la charla con la prensa ayer, Bonilla Carrillo se contradijo pues señaló que el sindicalismo es válido porque la ley así lo dice y que todo trabajador tiene derecho a pertenecer al sindicato que él quiera, pues “nadie tiene por qué obligar a nadie”.
Redacción
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