Quizá a muchos no les guste, pero el término PRIAN, acuñado por Andrés Manuel López Obrador, parece toda una realidad.
Nulificada la principal oposición, con un PAN resquebrajado, falto de crítica y de denuncia, dominado por la inacción, el partido en el poder carece del sano equilibrio necesario en cualquier democracia en cualquier parte del mundo.
Ayer, un ex dirigente de ese partido, ex senador y ex diputado federal y local, se agarró a golpes con otro ex diputado panista acusado de cobrar en un ayuntamiento tricolor. El caso de por sí es grave porque son dos ciudadanos enfrentados, además de políticos de un mismo partido y también son figuras públicas, pero lo más lamentable es que la dirigencia albiazul, que llegó hace no mucho a Comité Directivo Estatal con promesas de recuperar la unidad, fortalecer al partido y resurgir de la debacle del 2012, no sólo no ha procurado su promesa sino que hasta parece que es la más interesada en que las cosas sigan igual.
Cuando asumió el cargo, y desde antes, las acusaciones de un sector de ese partido en torno a sus presuntos nexos con el PRI no fueron pocos. Si a nivel nacional Gustavo Madero ha sido duramente cuestionado por adoptar una posición entreguista hacia el Gobierno Federal, Yolanda Valladares en Campeche ha sido peor. Hasta la propia presidenta del PRI, Ana Graciela Crisanty, criticó los sueldos de los alcaldes emanados de su propio partido y propuso imponer topes, mientras que la jefa panista simplemente dijo que no puede hacer nada.
Pero ¿y dónde están los panistas? Pareciera que la inmovilidad de la ‘jefa Yola’ hubiera tenido el objetivo de contagiar a todo el panismo campechano. Pareciera que su finalidad hubiese sido aniquilar todo resquicio de oposición. El PRD no cuenta desde hace mucho; Morena, PT y Movimiento Ciudadano son organizaciones raquíticas con una grave falta de liderazgo; el PAN, que es la segunda ‘fuerza’ política en la entidad y tendría todo para adoptar una posición firme que le granjeara el respeto de los ciudadanos, más parece PRIAN.
TUMBABURROS
Bofetón (Sust. común) ‘Cariñito’ a modo de reclamo entre políticos panistas. Forma de arreglar sus diferencias como ‘hombrecitos’ para que no digan que no le entran a los caguamazos. Pleito callejero protagonizado entre dos ex diputados de ese partido en Ciudad del Carmen.
Secuestro (Sust. muy común) Privación ilegal de la libertad. Irrupción de un grupo de sujetos al muelle de la API para tomar de rehenes a los trabajadores, lo que generó una gran movilización de fuerzas federales, aunque luego informen que se trató de un ‘ejercicio’ por lo que se presente.
Revisión (Sust. poco común) Dícese del examen cuidadoso de una cosa. Particularmente detallado y exhaustivo en el caso de los microbuses del transporte urbanos que son un peligro para todos. Verificaciones que no se realizan desde hace un año, aunque los accidentes sean el pan nuestro de cada día.




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