El estado de Campeche tuvo un alza descomunal de la inseguridad en un año, al registrar un incremento del 1,084.1 por ciento en el número de incidentes delictivos respecto al año previo, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).

Y aunque las autoridades estatales como la Fiscalía General del Estado (FGE) y la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana (SPSC) han minimizado y justificado el tema de la inseguridad en la entidad, la realidad es que es una autoridad federal la que ha evidenciado la situación crítica en el estado.

En el reporte ‘La incidencia delictiva del Fuero Común 2022’, con corte a junio pasado, de junio de 2021 a junio de 2022 hubo 2 mil 155 incidentes delictivos del fuero común en el estado de Campeche, esto es, un aumento del 1,084.1 por ciento, mientras que el promedio nacional el incremento fue del 6.5 por ciento.

Es decir, en la entidad se cometen 208.6 delitos por cada 100 mil habitantes, lo que ubica a Campeche por encima de estados con presencia del crimen organizado, como Tamaulipas, Michoacán, Morelos, Veracruz, Sinaloa, por mencionar algunos.

Las cifras del Secretariado Nacional de Seguridad Pública también reflejan que hubo un incremento del 16 por ciento en la incidencia delictiva de mayo a junio de este año, colocando a Campeche como la segunda entidad con mayor incremento en este rubro, sólo por debajo del estado de Coahuila.

Y todo ello es el reflejo de la incapacidad de la Secretaría de Protección y Seguridad Ciudadana, a cargo de Marcela Muñoz Martínez, que ha minimizado la situación y hasta ha declarado la ‘falsedad’ de ciertas situaciones, entreteniéndose con su programa dominical al cual obligan a burócratas a participar, mientras que la seguridad de miles de familias campechanas pende de alfileres, al incrementarse 10 veces los delitos que se cometen en la entidad.

Y es que todos los sectores, desde la sociedad civil hasta el empresarial, religioso y la oposición política al actual régimen, han pedido un cambio en la estrategia de seguridad del Gobierno estatal morenista, sin que hasta el momento el incremento sustancial sea motivo para una reacción inmediata de las autoridades.

Redacción.

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