Vladimir de la Torre
Golpe de Timón
Vladimir de la Torre Morín

Hotel Legislativo

Voces, Miércoles 16 mayo, 2012 a las 9:48 am

 

MONSANTO. A raíz de una autorización de la Sagarpa, la producción y exportación de miel está agonizando. ¿Evitable? Sí. ¿Irresponsable? También. Un grupo de activistas de Greenpeace se manifestó en varias partes de la península para exigir que el campo esté libre de productos genéticamente modificados, y no les falta razón. El conflicto se originó en la autorización que la dependencia federal otorgó a la trasnacional norteamericana Monsanto, empresa proveedora de productos agrícolas desde 1901, para que sembrara en la península, incluido Campeche, 30 mil hectáreas de soya transgénica.

El polen de la soya genéticamente modificada llegó a la miel, y la miel llegó a Europa. Tras cruzar el Atlántico, la miel fue rechazada y se prohibió su comercialización. El Tribunal de Justicia de la Comunidad Económica Europea resolvió en su expediente C-442/09 que quedaba prohibida la venta, en sus 27 países, de productos originados, derivados o con presencia de elementos transgénicos. El problema no fuera mayor, si Europa no fuera la receptora del 90 por ciento de la miel que se produce en México.

El caso no fuera importante si México no fuera el tercer exportador mundial de miel y si Campeche no fuera el principal productor de México. Monsanto ha solicitado de nueva cuenta a la Sagarpa a través del expediente Mon-04032-6 que se le autorice la siembra de otras 250 mil hectáreas en cinco polígonos de la península durante el 2012. Los productores de Hopelchén son de los más afectados por este caso. Los estudios económicos sostienen que en un análisis de impacto económico la producción de miel aporta tres veces más a la economía global que lo que aporta la soya modificada.

Si aún así lo autorizan, con los daños que ya representaron sólo 30 mil hectáreas es indicador de que alguien en alguna parte no está llevando miel para su panal pero sí granos para su molino.

HOTEL LEGISLATIVO. En condición de ciudadanos, el periodista del diario Carmen Hoy, Marco Antonio Peraza, y el empresario Leandro Espinoza, interpusieron una denuncia para que el ex diputado y ex presidente de la Gran Comisión del Congreso, Víctor Méndez Lanz, regresara a la legislatura actual. El juez de distrito concedió la petición y este jueves Méndez Lanz tendrá que ocupar su curul en el Congreso local. ¿Es legal? Sí ¿Políticamente correcto? No. El regreso de Don Víctor a su fracción será en condición de diputado y no necesariamente se encargará de la presidencia de la legislatura. El juez legalmente tiene la potestad de reinstalarlo como diputado pero es la fracción parlamentaria del PRI la que decide si ocupará o no la presidencia. El Congreso del Estado no es un hotel, un diputado no debe salirse cuando pueda y regresar cuando quiera. Personas allegadas a Méndez Lanz afirman que nunca estuvo de acuerdo con renunciar al Congreso y que lo aceptó, en un principio, como un gesto de reverencia política. El caso deja un mal precedente.

¿Motivó Lanz que la denuncia fuera interpuesta? Las respuestas viables son: 1-) El ex diputado pidió a Peraza y Espinoza que echaran a andar la denuncia, 2) No lo pidió pero lo sabía y no hizo nada por detenerlo y 3-) Peraza y Espinoza tomaron la iniciativa y ahora se tiene que cumplir lo que dictaminó el juez.

Víctor Méndez y Jorge Luis González Curi fueron dos ex pre-candidatos a la gubernatura de Campeche en el 2009. Un acuerdo no firmado le daría a cada uno la oportunidad desde el Congreso de presidir la Gran Comisión. El acuerdo está en marcha y su fracción parlamentaria esperaría de Víctor Méndez, que corresponda en el mismo sentido en que lo hizo González Curi durante más de dos años. Guardar prudencia y hacer silencio.

LA QUE SIGUE. El registro de Roberto Sarmiento en el primer lugar de la lista plurinominal del PRI para el Congreso local, sugiere que será el presidente de la Gran Comisión si su partido gana mayoría en el Congreso en julio próximo.

Con esta sugerencia quedaron en el camino por ahora, victimizado del proceso interno de su partido, Miguel Sulub, Gabriel Escalante, con una renuncia a la Secretaría de Coordinación aún no explicada; Víctor Salinas, manejando el proceso interno de su partido; y Ana Graciela Crisanty, que vela por los destinos de Peña Nieto en el estado.

Son piezas por acomodar en la segunda parte del sexenio. Un mes después que termine la fiesta electoral, el gobernador, Fernando Ortega, rendirá su Tercer Informe de Gobierno. Mucho ayudaría que pueda llegar al 7 de agosto con su gabinete en pleno. En tres años muchas cosas se pueden, se deben y se tienen que hacer.