Candidatos: mediocridad y pena

No han iniciado las campañas, pero usted prepare sus oídos, cuando inicien escuchará a todos prometiendo hasta lo imposible.

El candidato del PRI, Alejandro Moreno, ha sido explícito. El priista ha reiterado que atacará los índices de desempleo y suicidio en el estado. Falta hace, pero no ha dicho cómo. En la campaña lo hará.

El panista, Jorge Rosiñol, señala que acabará con la corrupción en el estado, lo dice, cuándo, nunca, en su ya larga carrera política ha interpuesto una denuncia contra un solo acto de corrupción en el estado, ya fue diputado, alcalde y diputado federal, nunca ni uno solo ha denunciado públicamente. Discurso abstracto, ambiguo y vago.

La morena Layda Sansores, con una carrera política más amplia, ha utilizado tribunas nacionales como el Senado y San Lázaro para denunciar con firmeza lo que ocurre en el país, entereza que le ha faltado cuando de campañas locales se trata. Llega a Campeche con la fuerza de sus expresiones nacionales, pero es prudente y precavida en usarla contra actores políticos y adversarios locales.

El ex diputado local, Cesar Lechuga, competirá representando lo que queda de Moci: “Si le gané al PRI en el 97, lo volveré a hacer”. Dice en su primera declaración, rotundamente política y fuera de contexto,  como si el 97 hubiese sido ayer y no hace 18 años.

Acompañado de cerca de 50 personas, el ex dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y ahora candidato por el PES, Roger Ortegón García, afirmó que tiene posibilidades de ser gobernador de Campeche. ¿Alguien ve cómo? Adelantó que trabajará por la salud y el campo, que también hace falta.

La carmelita Olimpia Álvarez representará al Partido Humanista, en su pobre presentación aseguró: “La gente en Carmen conoce mi trabajo, he tenido luchas arduas, me han metido a la cárcel, no tengo miedo de defenderlos, tengo el valor”.

El otro carmelita, Fernando Dante Imperiale, candidato del PRD, señaló: “Como parte de este gobierno honesto que voy a ejercer, anuncio un plan de austeridad..”, es el primero de todos en hablar de austeridad.

El candidato del Panal, Angelino Caamal, adelantó que el partido no hará uso de una campaña de desprestigio para colocarse dentro de las preferencias electorales y que su bandera será la de la serenidad, educación, seguridad, desarrollo económico y sustentable. Vacunándose en salud para que nadie espere una sola referencia al gobierno ni al partido oficial.

Pedro Góngora, candidato del PT, fue más sincero al decir que una abeja (el PT) no puede detener a un tren (el PRI). Este partido penosamente luchará en junio por no desaparecer.

Así se completa la planilla de los nueve candidatos a la gubernatura de Campeche.

Vamos por puntos:

-De los nueve candidatos solo tres  han sido diputados locales (Rosiñol, Luchuga y Caamal).

-De todos, sólo cuatro han sido diputados federales: (Moreno, Sansores, Rosiñol y Caamal)

-De los nueve solo dos han sido senadores: Moreno y Sansores.

-De todos solo dos (Rosiñol y Sansores) ha manejado recursos públicos con cargos en la administración pública.

-De todos los candidatos solo cuatro han ganado cargos de elección popular directa (Moreno, Rosiñol y Lechuga).

-Solo tres de los nueve cuentan un curriculum que los respalde para aspirar a gobernar Campeche: (Moreno, Sansores y Rosiñol).

No hay un solo punto, uno solo, en lo que coincidan los nueve candidatos, lo que es peor, no hay un solo tema en el que se puedan incluir siquiera a cinco de ellos que representan la mayoría de nueve.

Así de empobrecidos están los partidos, así de falta de calcio político estamos en Campeche. Así de escasa es la capacidad que se tiene para postular a los mejores candidatos, así de rudimentaria y amputada está la clase política local. La boleta a la gubernatura inspira dos conceptos: mediocridad y pena.

Por primera vez en la historia, cuatro carmelitas compiten por la gubernatura. Cuando el PAN anunció a Rosiñol, con el intento de al menos ganar los votos en Carmen, al que consideran (o consideraban) un bastión, la consigna en el PRI fue pulverizarlos. La estrategia era una aplanadora. “Mientras más candidatos carmelitas se registren más se dividirá el voto de la isla, y más favorece al candidato priista”.

La estrategia del PAN de acumular los votos de Carmen fue ingenua. Con la ayuda de otros tres partidos políticos (PRD, MOCI y el Partido Humanista) cuatro candidatos ahora son originarios de la isla. Aunque Imperiale, Olimpia y Lechuga representan muy poco en rendimiento electoral, si de algo sirven en este proceso es en restarle exclusividad al candidato panista.

La idea del PRI era evitar que su candidato enfrentara la elección con Carmen como un solo bloque en contra.

A la pulverización de los votos se suma las fracturas internas, panistas y simpatizantes del PAN  están sentados en las mesas del PRI buscando vender lo que les queda de capital político. La obsesión es buscar que el candidato priista supere el histórico de 172 mil 786 votos. ¿Lo logrará? Habrá que esperar.

REPERTORIO

-El regalo que tenían los reyes magos para Argáez llegó tarde pero finalmente le entregaron el oro, el incienso y la mirra.